1. La Quesona y el Viejo Albañil.


    Fecha: 27/09/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Male BD, Fuente: TodoRelatos

    ... pues me tomo de los brazos mientras yo estaba de espaldas, y de forma un poco salvaje me puso de espaldas contra la pared y me dijo:
    
    -Dame ese queso que me andabas meneando María Elena.
    
    Acto seguido abrí las piernas y levante ligeramente mi culito para que el pudiera entrar, por lo que sentí en ese momento como introducía su verga en mi culo, al principio me penetro de forma suave y podría decirse que hasta lo hizo de una manera tierna, sin embargo, entre más estaba dentro de mí yo sentía que su verga se ponía más y más dura, y sus embestidas eran cada vez más fuertes y constantes, al principio si dolía pues nunca me habían hecho sexo anal, pero luego me adapte.
    
    Me besaba el cuello y la boca, y ahí estaba yo semidesnuda teniendo de tras mío a un albañil viejo, gordo y moreno penetrándome por el ano, justo en la sala de mi casa, mientras me decía lo rico que tenía mi fundillo, me acariciaba las tetas y el abdomen, luego me volteo y cuando estábamos frente a frente nos vimos a los ojos y comenzó a besarme como nadie lo había hecho antes, me metía la lengua, me besaba la cara y el cuello, al mismo tiempo que me decía lo chula que yo estaba, y que nunca en su vida pensó en cogerse a una nena tan finita como yo, posterior a eso me dijo que ahora si me haría su vieja, mientras que con un brazo me tomo y me acerco hacia él.
    
    Yo logre zafarme y comenzamos a juguetear un poco, pues desnudo y con su verga negra bien parada Elpidio comenzó a perseguirme por la casa, mientras me decía: - ¡Dame lo que tienes entre las patas Male!
    
    Y yo corriendo en tacones semidesnuda por toda la casa mientras el viejo albañil me correteaba, y cada vez que me alcanzaba me daba un ligero pellizco en mis nalgas redonditas, lo que hacia que yo pegara unos pequeños gritos mientras me reía de la emoción, corría me alcanzaba, me pellizcaba y yo gritaba, corría me alcanzaba, me pellizcaba yo gritaba y reíamos juntos, y así estuvimos un rato hasta que me canse y subimos a mi habitación.
    
    Ahí me pare frente a él y sacudí de un lado al otro mi culo, ya que eso realmente le gustaba mucho mientras le decía: ¿Te gusta esto Elpidio?, sin decir una palabra me quito de un jalón mi blusita ombliguera y sin que tuviera la oportunidad de quitarme los tacones me empujo violentamente contra la cama en posición bocabajo, y se montó encima de mí, penetrándome por mi vagina, así que él quedo encima de mi dándome la cogida de mi vida, ambos gemíamos como locos de placer.
    
    Pues les aseguro que el señor sabía coger muy bien, todo chaparro, moreno y gordo, pero buen follador, después pauso unos minutos y creí que había terminado, pero no fue así, ya que él de nuevo me penetro, y comenzó a cogerme con mucha fuerza mientras me gritaba leperadas, hasta podía sentir su aliento alcohólico.
    
    Luego de un delicioso y lo que para mí fue un largo rato, soltó un fuerte gemido, al mismo tiempo que sentí como me impregnaba desde el interior de mi vagina un líquido tibio, se mantuvo dentro de mí ...