A la vejez, Paco - Relatos Eróticos

A la vejez, Paco

... verdad. El aguante de Paco le hace un buen compañero de juegos. María está feliz, me muestra su cariño día tras día…y su comprensión. No me da motivos de celos. Aún no he encontrado trabajo, pero tampoco nos va mal la vida. Paco no es una carga para nosotros. Todo va bien entre los tres. Cada uno sabe lo que tiene que hacer, cuando debe hacerlo, lo que desea el otro y como ser paciente. María es lo principal. Ella es la que tiene que quedar plenamente satisfecha. Sin ella esto terminaría, aunque a decir verdad…yo creo que he descubierto una nueva faceta en mi vida y que a María la enciende. No siempre, pero alguna que otra vez me follo a Paco por el ano mientras María, agachada bajo su cuerpo, le chupa la polla a la vez que él la masturba con sus dedos.

Creo que me he convertido en bisexual. Si, porque si una vez probé a chupar la polla de Paco por la inercia de la excitación, ahora es por deseo. Y deseo darle por el culo cuando él está predispuesto. Vivimos felices. A la vejez, viruelas. Es un refrán o una alocución que se utiliza para referirse a aquellas cosas que se realizan fuera de la edad pertinente o cuando ya no tocan (normalmente por criterio social). Sirva de ejemplo el caso de una persona que por ejemplo, tiene 65 años y se casa con otra de veinte. En muestro caso, castos hasta la madurez, nos hemos desatado y parece que hemos descubierto el sexo ahora. Y en cierto modo así es. Hemos descubierto una nueva forma, más placentera, de disfrutar del sexo. A la vejez, Paco.

Coronel Winston©