1. Pagando favores con mi cuerpo (5ª parte)


    Fecha: 12/04/2024, Categorías: Control Mental, Autor: MarArrOrt, Fuente: TodoRelatos

    ... dar una gran impresión a Gene si te presentas tartamudeando y quedándote en silencio. Te recomiendo que vuelvas a casa, te despejes y lo intentes en otra ocasión.
    
    Brusco, pero parece un buen consejo. Me recuerda a Adeline.
    
    —Vale… eso haré.
    
    —Bien. Si quieres, le digo algo de tu parte.
    
    —¿Sí?
    
    —La voy a ver igualmente, me da igual decirle algo.
    
    —Le puedes decir que… ¿Mañana me pasaré?
    
    —¿Mañana te pasarás?
    
    —Si no puedo, enviaré a mis mayordomos a lomos de un dragón a decírselo.
    
    He conseguido que sonría un poco.
    
    —Está bien. Así tienes el día para despejarte. Le diré que te pasarás a lo largo del día. Adiós.
    
    —Adiós, gracias.
    
    Kalia entra y yo vuelvo a casa.
    
    Llego a casa. Adeline está rara y tras indagar confiesa que al no estar yo presente y no tener ella nada que hacer, fue a la fiesta y acabó con algo de resaca. Me alegro de que no me la encontrara y voy a mi habitación. Intento leer algo ligero, pienso sobre mi relación con ella y medito largamente sobre Gene. Decido que lo que más me importa es seguir conociéndola, sin compromiso, y que será como lo enfoque mañana. Me voy a dormir.
    
    Voy a desayunar y siento terror cuando veo que un mensajero ha entregado otra carta, porque asumo que será de Gahan. Las sospechas se confirman.
    
    Estimado Alden,
    
    No esperaba contactarte de nuevo tan pronto pero me ha surgido una grandiosa oportunidad, acude a mi domicilio tan prontamente como puedas.
    
    PD: Lamento la caligrafía de esta misiva, a diferencia de la anterior nadie me ha dejado su cuerpo para escribirla así que no podrás gozar de mi letra, solo puedo dictarle al mensajero.
    
    Tuyo, Gahan.
    
    Me pregunto cuantos secuaces tendrá para que encuentre quien le escriba y entregue una carta tan rápidamente. En cualquier caso, ya no tengo hambre, pero me obligo a comer. Adeline se ha levantado antes para prepararlo y no quiero ser desconsiderado.
    
    Antes de irme pienso sobre si debería decirle algo.
    
    —Adeline… ¿te aburres cuando estás sola en casa?
    
    Tarda en contestar, parece reflexiva.
    
    —Si. Si lo dice por que me marché ayer, lamento el inconveniente y…
    
    —No, no. No fue ningún inconveniente. Pero me sabe mal. El contrato que tienes… Nunca te he preguntado los detalles.
    
    —Su tío me contrató para vivir aquí durante un año, como ama de llaves y criada.
    
    Sus palabras ayer fueron «No estaba en casa y no había trabajo, así que pensé en ausentarme un poco». La verdad es que apenas hay trabajo, aquí solo vivimos ella y yo. Pero casi siempre estoy en casa y se queda pendiente de si necesito algo.
    
    —Adeline… ¿Puedo hacer algo para que estés más cómoda?
    
    Parece desconcertada
    
    —¿A qué se refiere?
    
    —A… Oye, no es lo que estaba pensando, pero puedes dejar de hablarme de usted.
    
    —… ¿Está seguro? Su tío insistió en que el protocolo era hablarles de usted.
    
    —Si, ese es el protocolo, pero… Tampoco estamos en un palacio y creo que me sentiré más cómodo si me tuteas.
    
    —… Cómo quieras.
    
    —Vale, pues… Me sabe mal ...
«12...456...9»