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... sobre las otras, aquí si se quejó.

Pepi- !!Joder!!, Duele mucho.

Yo- Ok, esa es la cuestión y la finalidad, que te duela, así cuando te diga que me la chupes y cuando termines te las quito, lo harás más rápido.

Se puso su camiseta y cada vez que se movía se quejaba, estaba imaginando lo que serían unos buenos apretones, así que no quise esperar más y la ordene que se quitara la camiseta y me chupara la polla, estaba en ello en menos de un minuto, cuando estuvo bien dura, la lleve a un rincón del salón, apoyando su cabeza en la pared, separé sus piernas y la ordene abrir su cachetes del culo, metiéndole la polla hasta el fondo, me agarré a sus tetas, estrujándolas y arrancando quejidos de su garganta, un buen par de cachetes en las tetas, basto para que callase, estuve follándola, como 20 o 30 minutos, lo que aguante, porque sobar sus te tetas, pellizcar sus pezones, con las pinzas puestas y ver cómo la muy puta de se corría un par de veces, fue superior a mis ganas de seguir follándola. Se la mantuve en el culo todo el tiempo que pude, mientas seguía estrujándole las tetas, con continuas quejas y continuos cachetes para que se callase, cuando ya flácida se salió de su culo, la ordene que pudiese las manos en la espalda, la lleve al sofá, ordenándola que se pusiese de rodillas, luego me senté y agachándola le metí la polla en la boca, ella chupo lo que pudo, y yo, seguí estrujándole las tetas, con tantas ganas que en uno de los pezones se le cayeron las pinzas.

Yo- como te dije antes, cuando me corra te desato las tetas.

Chupo con ansia y muchas ganas, pero siempre notaba que faltaba algo, aun así seguí estrujando y zurrando sus tetas y también su culo, era una delicia, unas tetas de ese tamaño y duras, como no las había tenido nunca y quejándose cada cachete, cada apretón, lo dicho, una delicia. Cuando tuve la polla bien tiesa, la cogí del pelo y la obligué a tragarse toda mi polla, manteniéndola en su garganta hasta que le hacía falta respirar. La mamada duro algo más de media hora, al final termine corriéndome en su garganta, con un par de arcadas bastante fuertes, pero las controló bien. Cuando terminó, de los pelos y al suelo, a limpiar todas sus babas, estuvo como 10 o 15 minutos. Luego desate sus tetas.

Yo- Seguro que no sabes cuántas veces te has corrido.

Pepi- Muchas, pero joder, como duele, pero nunca me había corrido así, muchas gracias amo, me encanta lo que estoy sintiendo, gozando y disfrutando.

Me beso en la boca, creo que fue el beso que, con más ganas, me había dado.

Yo- Bueno, vamos a descansar un poquito, que me lo he ganado. Menos mal que van a ser cuatro días, si es un mes, me tienes que enterrar.

Nos reímos los dos, ella se puso la camiseta y unas bragas y yo mi pantalón, quedándonos recostados en el sofá y terminamos quedándonos dormidos. Nos despertamos sobre las 23'00h,

Yo- No sé si irnos a la cama o darte otra zurra en las tetas y en esa cara de puta viciosa que tienes.

Pepi- Mejor nos ...