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... quejó, pero un cachete en la teta que ya estaba atada, acabó las protestas, luego me senté en el sofá y ella se arrodilló lamiendo mis huevos y chupando de polla, cada vez lo hacía mejor, la pedí que trajese la varita, que la iba a dar unos fustazos en el culo, lo hizo y siguió chupando, cuando recibió los primeros fustazos, se calentaba por momentos, ya que su nariz daba con mi pubis, mientras que notaba su campanilla, yo estaba que aguantaría poco, así que la ordene parar y fui a buscarlas tuercas que le puse la otra vez en los pezones, las localicé y puse las cuatro, dos en cada cuerda, luego acorte las cuerdas y salí al salón, quite las pinzas y coloque las cuerdas con las tuercas, las solté de golpe, se quejó, pero no la hice caso, luego la dije

Yo- Lame mi polla que te voy a follar y deja de quejarte o tendrás una buena.

Lamió mi polla, mis huevos y vuelta otra vez a mi polla, tiré de ella colocándola sobre mí y cogiendo mi polla se la metió de golpe hasta los ovarios, luego empezó un suave mete y saca, profundo y lento, mientras retorcía sus pezones y estrujaba sus tetas, se le saltaban algunas lágrimas pero estaba gozando, porque su coño estaba supermojado, la di unos buenos azotes en el culo y tuvo un orgasmo, que ella misma se sorprendió, luego me beso mientras terminaba, volví a sobar sus tetas estrujándolas todo lo que pude, retorcí sus pezones, y la di un par de hostias en la cara de viciosa, volvió a correrse y yo con ella, volviendo a estrujar sus tetas hasta que terminamos, luego se descabalgo y se puso a lamer mi polla, huevos escroto y otra vez mi polla. Antes de que empezase la mamada pendiente la dije.

Yo- Límpiate bien el coño y cuando no salga ni una gota siéntate en el borde del sofá y espatárrate, como ayer que te voy a dar una buena tunda en el coño

Pepi- Es que duele mucho, así de abierta y puedes dejarme marcas.

Yo- Vamos a ver, so puta, que vas a enseñarles el coño a tus hijos, porque si lo ve el gilipollas de tu marido, con decirle que has estado follando con otro, solucionado.

Se puso a limpiar su coño, metiendo los dedos y chupándolos, mientras me levanté a por la varita mágica, para darle una buena tunda, cuando llegue se sentó, echo su espalda hacia atrás y separando sus piernas todo lo que pudo las sujeto con sus manos, aproveché que estaba pendiente de su coño para soltarle cuatro fustazos bien fuerte en las tetas, se sorprendió, luego cambie a su coño, donde la atice con fuerza, al igual que en las ingles y la cara interna de los muslos luego cambie, volviendo a sus tetas y repetí al coño, ahora en diagonal, ya tenía un buen empalme así que aproveché para subirme sobre ella, que soltó sus piernas para follarme esas tetazas.

Yo- Escupe bien en la tetas, zorra, que me las voy a follar

Metí mi polla entre ese par de tetazas y estrujándolas, comencé a pajearme, la daba alguna que otra hostia en la cara, porque no escupía lo suficiente, pero a la tercera lo entendió y ya solo me dedique a ...