La zorra es compartida - Relatos Eróticos

La zorra es compartida

... una pareja follando pero todavía quedaba hueco en la cama, así que allá vamos. Tomo la iniciativa y coloco boca arriba a Viggo colocándome encima para hacer un 69. Mi Amo no se une por el momento, se sienta en un sillón cercano y se dispone a disfrutar del espectáculo.

Después de un rato masturbándonos mutuamente me acerco a su oído -quiero tu polla en mi culo- me quito y me pongo a cuatro. He dejado mi bolsita de condones y lubricantes cerca. Veo que Viggo ya se está colocando un condón por lo que localizo el lubricante y me lo aplico en mi ano.

-Zorrita, llevabas el lubricante? Que puta eres- mi Amo es muy observador, sonríe, encojo los hombros y asiento. Es verdad, soy muy puta, y desde el principio quería esa polla grande horadando en mi culo.

Se coloca y se introduce en mí. Ostras!!! Por un momento me arrepiento de mi decisión, es grande y me hace daño y me estira por dentro. Pero aguanto. Viggo empieza a imponer un buen ritmo, me cuesta adaptarme pero al final lo consigo. Miró a mi Amo y se acerca a mí.

-¿Estás bien zorrita?- su presencia me apacigua, me envuelve.

-Creia que me partía en dos Amo, pero ya va bien. Aaaahhhh!!!!-

Empiezo a gemir y a chillar como una loca, me está dando mucho placer, la siento tan bien dentro de mí que me evado de todo.

-Esta putita está gritando muy alto, voy a tener que taparle la boca-.

Bien!!! Mi Amo se ha animado y se sienta enfrente de mí para ofrecerme su dura polla. Avanzamos en excitación, ritmo y nos llega el clímax. Viggo dentro de mí, yo en medio de todo y mi Amo en mi boca. Uffff que despliegue de medios y que muerta estoy. Viggo ha sido implacable y estoy desfallecida.

Recogemos y nos vamos… en la calle paramos dos coches. Me despido de ambos con un beso en los labios. Es tarde, muy tarde. Voy sola a casa en el taxi. No tengo sueño, no sé cómo conseguiré dormir cuando llegue a casa. Ha sido un día increíble y tengo mucho que gestionar.