El chat me ayudó con mi sobrina 5 (Reeditado) - Relatos Eróticos

El chat me ayudó con mi sobrina 5 (Reeditado)

... todas estaban muy absortas en sus menesteres, por lo que me centré a afinar mis caricias. Metí la mano bajo un suéter y encontré un sujetador, lo separé del cuerpo y dos tetas hermosas me cayeron en la mano, apreté los pezones y reconocí los de Bea, los apreté y le hice saber que la había reconocido, luego metí la mano bajo una falda y bajo las bragas noté unos labios grandes y perforados, no había duda de que eran de Sofía, así que le introduje dos dedos moviéndose de adentro afuera.

Al fin, por eliminación, sólo me quedaba Cris pero como estaba a mis pies sólo podía acariciar con mis dedos de los pies entre sus bragas. Noté como abría sus piernas del todo y se apretaba contra mi pié, moviéndose en busca con su clítoris. Como llevaba un tanga, pronto separé el cordón fino dejándolo a un lado, metí el dedo gordo en su vagina hasta que se descargó sobre él y se lo metió todo, la pena es que era demasiado corto, pero por lo menos era gordo.

Poco a poco fue poniéndose a mi alcance y pude coger sus tetas bajo el sujetador y comprobar que me llenaba bastante la mano a la vez que los pezones se enredaban entre mis dedos, ella se movía facilitando que cogiera los dos y que notara sus tetas ya adorables. Yo ya tenía la polla completamente dura que pasaba de una mano a otra y de una boca a otra.

No podía ver nada, pues me ocultaban la vista, aunque no sé quién tendría la primera idea y en complicidad de las otras dos, se apoyó sobre mi pene, y ayudada de una mano anónima se la metió en la vagina y se dejó caer hasta que se sentó en mi muy depilada pelvis. No me atreví a moverme, pues no sabía de quién era ese coño, ya que no quería correrme adentro y tuve que estar quieto con la polla al máximo y los huevos a punto de reventar.

La incógnita se fue desvelando poco a poco, ya que fue acelerando hasta que aun notando mis palpitaciones en el glande, esperó a que me saliera un torrente de leche que inundó mi pene, saliendo por todo el tronco hacia los huevos.

Por lo estrecho de la vagina y el que hubiera aguantado mi corrida deduje que fue Bea, se había lanzado y a las demás no les pareció mal, pues ya empezado el jamón… nadie quería quedarse sin su ración, porque pronto una boca me relamió y me succionó los restos de leche que me quedaba, mientras otras manos untaban de crema por todo el pene y luego también se puso encima, pero esta vez era más estrecho, aunque con buena disposición entró, acompañado de suspiros lastimeros, hasta que después de entrar el glande, ya entró el resto hasta el final.

Por supuesto cerró sus nalgas sobre mí y noté las piernas delgadas de Cris que abrazaban mi cuerpo y saltaba alegremente mientras se sujetaba en los hombros de sus compañeras. Mi polla ya no se preocupó del posible embarazo y me corrí con toda libertad levantando mi polla, cuando me llegó la eyaculación, dejé su culo lleno de leche.

Pasaron unos instantes de quietud, notaba que estaban intercambiando miradas, yo no me atreví a decir nada por no ...