1. Mi primera vez – Parte final – La entrega


    Fecha: 09/09/2024, Categorías: Incesto Autor: NekkyHot, Fuente: SexoSinTabues30

    ... ver que vas a sentirlo diferente y podrás moverte como tú quieras_
    
    Con sus manos me guio para que me pudiera montar en él. Torpemente me acomodé y busqué la forma de sentarme, pero evidentemente no sabía cómo, por lo que con dulzura me fue llevando y me dijo cómo acomodarme.
    
    _Con tu mano agarra mi pene y ponlo en la entrada y poco a poco velo metiendo. Hazlo suavemente para que no sientas que te lastimas_
    
    Así lo hice. Con cuidado me acomodé de tal forma que mientras me sostenía con mi mano izquierda en el pecho de mi tío, con la mano derecha tomé su miembro y lo acomodé en la entrada de mi vagina y poco a poco fui bajando. Centímetro a centímetro, mi humanidad fue devorando el viril instrumento de mi tío hasta que no quedó nada a la vista. Wow… sin quererlo, me lo metí todo. Era una sensación impactante el sentir todo aquello dentro de mí y lo mejor, es que el dolor prácticamente ya se había ido; solo estaba una leve sensación que ante la emoción y excitación terminó por desaparecer.
    
    _Ahora, recárgate con tus manos en mi pecho para que puedas moverte de arriba abajo… hazlo como tú quieras… tu pones el ritmo y la intensidad_ fue la indicación de mi tío
    
    Me acomodé como dijo y poco a poco empecé el movimiento como lo señaló… levanté un poco mi cadera para poder tener más rango de movilidad… y poco a poco el movimiento se hizo más marcado. Las manos de mi tío me tomaron por la cadera y sutilmente me ayudaba a marcar el movimiento. Nuevamente los jadeos empezaron a ser intensos y mientras más me movía, más placer sentía. Abrí los ojos y al ver a mi tío así, debajo de mí, tomando mi cadera y sintiendo su pene en lo profundo de mi vagina fue una visión que me prendió. Por primera vez, en ese justo momento ya no me sentía como una primeriza o inexperta… esa posición me elevó a un lugar en el que mentalmente nunca había estado. Sin duda, fue un maravilloso regalo.
    
    Cuando mis caderas estaban en el pleno movimiento de subir y bajar mi tío dijo:
    
    _También puedes cambiar el movimiento_ me detuve un momento para poner atención
    
    _Ahora, en lugar de subir y bajar, puedes moverte de adelante hacia atrás… como si literalmente estuvieras cabalgando. Verás que vas a sentir muy rico_
    
    De inmediato hice lo que me dijo. Bajé por completo hasta quedar totalmente sentada en la pelvis de mi tío y empecé el movimiento… empecé a cabalgarlo… ¡Dios! La sensación fue intensa desde el primer momento. Al moverme así pude sentir al instante que el movimiento provocó el roce de mi clítoris con el cuerpo de mi tío y eso me estremeció una vez más. Me gustó tanto que de inmediato me enganché en ese movimiento y me seguí… moviéndome cadenciosamente mientras las manos de mi tío alternaban sus caricias entre mis nalgas y mis senos. Apretaban, estrujaban y tomaban con firmeza mis partes mientras yo me entregaba a aquella mágica sensación que me hacía volar con cada movimiento y cada roce. Mis jadeos y gemidos iban al compás del movimiento de mi cadera mientras ...
«12...91011...15»