Solos en Vacaciones, Con dos Chilenos - Relatos Eróticos

Solos en Vacaciones, Con dos Chilenos

... bien que coges…, no me equivoqué contigo.

Yo seguí moviéndome hasta que el de abajo acabó dentro de mi concha justo en el momento en el que estaba teniendo otro orgasmo.

El de atrás soltó mi cabello, me la sacó despacio y se metió en el baño. Yo me quedé abotonada, abrazándolo, besándolo y acariciándole su cabello con ambas manos.

Comenzó a susurrarme cosas al oído… nunca te voy a olvidar argentina…, me encantó hacer el amor contigo. Su pija aún tenía algo de fuerza…, comencé a moverme despacito abrazada a él y le respondí…, yo tampoco te voy a olvidar chileno…, pasé una noche espectacular con ustedes…

Era la despedida…, quería acabar una vez más…, vamos con el último, le dije…

Y así fue…, a los diez o quince minutos de movimientos lentos, suaves y profundos, besándonos constantemente, acabamos los dos juntos.

Su pija perdió toda la fuerza y aún así la sentía, yo no quería despegarme de él.

Aproveché para preguntarle…Que es eso de la apuesta ¿?, que apostaron ¿?

Solamente sonrió…, no me contestó nada…

El otro tipo que ya se había bañado y cambiado interrumpió diciendo…, apúrate que vamos a perder el vuelo, ya eran las 6 de la mañana.

Aunque no quería hacerlo, me despegué de él y los dos comenzamos a vestirnos rápidamente, ni siquiera me dio tiempo de lavarme la cara y tampoco de ir al baño, no aguantaba las ganas de hacer pis.

Yo seguía intrigada con eso de la apuesta…, así que volví a preguntar pero ahora a los dos… Que es eso de la apuesta ¿?..., me pueden explicar por favor…

El que no había querido contestarme, supongo que por vergüenza, le pidió al otro que lo hiciera, el que sin ningún problema lo explicó…

Anoche estábamos en el bar mirando mujeres…, luego entraste tú y nos llamaste mucho la atención. Te sentaste…, vimos que hablaste con un hombre mayor, el que en menos de dos minutos se fue. Ah si…., el viejo baboso…, interrumpí.

Después te pusiste a hablar con un muchacho joven…, ahí comenzamos a especular sobre ti y lo que estabas haciendo en ese lugar…

Aquí el amigo…, dijo que eras una prostituta y que seguramente ninguno de esos dos había alcanzado tu tarifa…

En cambio yo dije que seguramente eras una mujer divorciada en busca de aventuras y diversión.

Tratamos de preguntarte cuanto cobrabas por tus servicios, pero ninguno de los dos se animó.

Luego vinimos acá y cuando te desnudaste…, esperábamos que nos dijeras cuanto nos iba a costar estar contigo…

Apostamos 200 dólares a ver quién de los dos acertaba y bueno…, yo gané la apuesta porque no eres una prostituta.

Me quedé boquiabierta con lo que me acababa de decir…, reconozco que soy puta pero jamás pensé en que estaba dando esa imagen.

Mientras éste me decía todo eso, el otro disimuladamente se agachó, metió la mano por debajo de la cama y sacó una cámara fotográfica, de esas profesionales que generalmente usan los fotógrafos o periodistas, la que rápidamente guardó en una mochila, tratando de que yo no me diera ...