Como vos mandes... Pablo 1 - Relatos Eróticos

Como vos mandes... Pablo 1

... zorritas.

- Ya podéis correros, pero no quiero una voz.

Ambas mujeres empiezan a contorsionar su cuerpo a la vez que se balancean sobre la silla. Se miran y remiran, sus bocas se acercan pero no se tocan, los pezones se marcan bajo sus blusas. Sus manos se retuercen buscando placer. Juana es la primera en correrse y abriendo sus piernas se deja ir en un grito ahogado que apenas traspasa su boca. Mariel sonríe al ser la ganadora y se deja ir igualmente apretando los pechos de Juana. Las dos nos están poniendo muy burros, al menos a mí. Casi fuera de control dejó unos billetes sobre la mesa y cogiendo por la muñeca a Mariel, salimos del local. La otra pareja hace lo mismo. Mientras nosotros nos damos la mano en una despedida hasta la noche, ellas se dan un pico y se sonríen. Vamos caminando al hotel, el camino es corto pero se me hace eterno. Quiero follarme a esa gata, lo deseo, lo ansío, lo necesito. Entramos en el hotel, no puedo aguantar y en el ascensor le doy un caliente morreo, mientras aprieto uno de sus pezones. Mariel cierra las piernas y gime.

- Jodeeeer, Jodeeeer, jodeeeer.

Entramos en la habitación .

- Tírate en la cama y levanta tus faldas.

Esta preciosa con sus piernas abiertas y su sexo expuesto. Su humedad me llama y me lanzó a su coño. Primero límpio bien el interior de sus muslos, para ascender hasta sus labios que lamo con delicadeza y pasión. Recorro su raja con mi lengua sorbiendo todos sus jugos. Cada vez entró un poco más en ella hasta notar su clítoris abultado y duro que espera mi lengua. Lo recojo entre mis labios y con la punta de mi lengua le voy dando pequeños golpecitos. Lo lamo, lo chupo, lo sorbo. Mariel se agita, con sus manos sujeta mi cabeza apretándola contra su sexo.

- Vos, no pares, no pares. Me llega jodeeersiiiii

Meto dos dedos en ella y la pajeo con fuerza, baña mi mano, la saco ahora meto tres dedos y vuelvo a follarla. Sus líquidos recorren mi cara mientras procuro tragar todo lo que puedo.

Ahhhhsiiiiii, siiiiii chilla sin medida loca de placer.

- Me meo maestro, me meo siiiiiijodeeeersiiiiiii no pareeeee, no pareeeeee.

- Eres una buena zorra. Levántate que te voy a desnudar

Mariel se pone de pie, se mira al espejo, se inca de rodillas ante mi y desabrocha mi cinturón, baja mi pantalón y mi calzoncillo dejando mi enhiesta polla pegada a su cara. Saca su lengua y la lame. Mientras saca mis calzoncillos por los pies, sonríe. Levantándola desabrochó su blusa, acarició sus tetas sopesando cada una y pellizcando sus pezones. Desabrochó el cinturón de su falda y el broche dejándola caer a sus pies. Le doy un azote en el culo.

- Ahora tu quitaté todo lo demás, yo haré lo mismo.

Me acerco a mi maleta, me quitó la camisa, los zapatos y los calcetines.

Voy a la maleta y busco hasta encontrar el floguer. Al darme la vuelta veo a Mariel con su culo sacado y sus manos en los tobillos.

- Quieta, ni te muevas.

La azotó preguntándole ¿ qué es? Su puta, su zorra, su ...