1. A la vejez, Paco


    Fecha: 29/03/2019, Categorías: Sexo en Grupo Autor: coronelwinston, Fuente: TodoRelatos

    ... cierto cariño. No me disgusta.
    
    -No se, déjame que lo piense.
    
    -Tendremos que pensarlo los dos, ¿no?-Respondió ella.
    
    -Tú ya lo has pensado, María. Por tu parte no hay problema…
    
    -¡Pues entonces no hay nada más que pensar!. ¿No te parece?-Respondió ella.
    
    -¿Y cómo lo hacemos?. ¿Le invitamos a cenar y así sin más…?
    
    -Mira, Juanjo. Cuando has ido a ver al fisio, he estado hablando con él. ¿Sabes lo que me ha dicho?.
    
    -Cualquier disparate.
    
    -No. Me ha dicho que nos había oído en la ducha mientras te la chupaba. Y como es tan descarado, me ha terminado diciendo que se había masturbado mientras nos oía. ¿Y sabes más?, eso me ha puesto caliente.
    
    -¡Joder con Paco!. ¿Y tú que le has dicho?-Pregunté.
    
    -Nada. ¿Qué le iba a decir?. Me quedé cortada. Luego le di vueltas a la situación y pensé que no estaría mal hacerlo con él. Tiene una polla muy gorda, no me lo puedes negar.
    
    -Ah, eso es lo de menos.
    
    -Si quieres, yo estoy dispuesta. Solo falta que te decidas.
    
    Aquello era muy revelador. María lanzada. Era nuevo para mi, pero por otra parte, tampoco me podía extrañar. Habíamos hablado muchas veces de que si alguna vez estábamos predispuestos, lo haríamos. La vida se vive solo una vez y nuestros cuerpos ya no paseaban 30 años. Al final me lancé.
    
    -Si estás segura, adelante. Pero yo llevaré las riendas de la situación.
    
    -Vale, perfecto. ¿Cuándo le invitamos?-Preguntó ella.
    
    -Este sábado, por ejemplo.
    
    -¿A cenar?.
    
    -Si-Asentí.
    
    Cuando llegó la tarde noche del sábado, María estaba algo excitada. Yo también, aunque algo receloso. Había asimilado la idea de que sería Paco el tipo que se follaría a María. Siempre había pensado en otro tipo más joven, con una buena polla para que la colmara de placer, pero ella había elegido la ocasión y Paco era el afortunado. Tal vez, me decía entre dientes, no fuera tan descabellada la idea. Quería que ella gozara de otro hombre y yo con ella en mis brazos, pero Paco no parecía que me iba a ofrecer ninguna garantía. Temía que todo fuese un desastre y que ya jamás volviésemos a tener otra ocasión por lo amarga que podía ser la experiencia. Al final, claudiqué. Siempre claudicamos los hombres ante situaciones como éstas.
    
    Paco llegó con un ramo de flores, una caja de bombones y una botella de vino de reserva. Le hicimos pasar al salón y nos acomodamos los tres. Tanto María, que estaba muy predispuesta, como yo, que estaba algo nervioso, sabíamos como teníamos que actuar. Iríamos de cara, de frente.
    
    Tras charlar un rato sobre asuntos nada relevantes para lo que nos había reunido en nuestra casa, pasé al ataque.
    
    -Te preguntarás, amigo Paco, como es que te hemos invitado a cenar-Dije mientras tomábamos una copa los tres.
    
    -Bueno, para ser sincero…no me lo esperaba, pero os lo agradezco infinito. Ya sabéis que vivo solo y que no tengo una vida social más allá de mi trabajo y el gimnasio.
    
    -Ya. El caso es que María me ha contado vuestra conversación del otro día cuando os encontrasteis ...
«12...567...14»