-
Clítoris reventado
Fecha: 24/06/2024, Categorías: Lesbianas Autor: yanine10, Fuente: TodoRelatos
... enfermera lo dejó a un lado... La vi mirarme. - "Deberías haber hecho lo que dijo la doctora... Ahora te quedarás sin nada abajo." Sostuvo el cuenco debajo de mis piernas abiertas. - "¡Y aquí está la otra mitad!", dijo de nuevo la doctora, levantando la carne ensangrentada... Al ver el tamaño de mi clítoris y saber el dolor que me había costado, me alegré de que se hubiera ido. Lo dejó caer en el cuenco y luego tiró a un lado las tijeras... Cogió un equipo de sutura y cosió el agujero ensangrentado que había sido la base de mi órgano agrandado... Luego volvió a levantar las tijeras y me dijo muy enfadada: - "¡Me he visto obligada a hacer el equivalente a recoger una cereza!... Tuve que quitarlo todo, hasta la raíz... ¡Nunca volverás a tener un orgasmo a través de la estimulación en esa área!" Pellizcó la parte superior de mis labios vaginales y mordisqueó un centímetro de ellos para ver la sensibilidad que había quedado. Se apresuró a cortar carne de mis labios y la enfermera la echó en un cuenco... Luego cogió un bisturí y cortó dos centímetros por encima de mi raja vaginal... Pellizcó toda el área y comenzó a coser, con un movimiento elegante, una espiral de adentro y afuera, cerrando mi raja permanentemente, deteniéndose antes de mi orificio para orinar cateterizado... Cortó el hilo. - "Qué pena... Todo se ha perdido... Debo concluir que el experimento es un fracaso: debido a la ampliación, el tejido no puede resistir la estimulación y el proceso hace que la paciente no pueda resistir esto... Así que te llevarán de regreso a tu habitación para que te recuperes y luego dejarás este hospital", dijo con tristeza. Me sacaron en silla de ruedas de allí con las piernas abiertas y un pesado vendaje sobre la ingle. Me recuperé lo suficientemente bien como para irme a casa una semana después. Cuando se quitó el vendaje, me quedé atónita al ver que mi coño ahora tenía una cicatriz hasta el orificio de mi pis y encima no había nada más que labios externos cerrados y el orificio vaginal. Cuando curé, Anna besó la cicatriz, me llamó su perra calva y sin clítoris, mientras metía su puño en mi ano y follaba mi vagina con un consolador del punto G... Miré mi entrepierna y pensé en cómo había perdido mi clítoris, y las lágrimas se pusieron a salir de mis ojos... Grité y mis gritos llenaron la habitación. Sólo porque pensé en eso me dio un orgasmo tremendo... Al menos no había perdido las ganas de correrme y disfrutar... Ahora sería de otra manera, más costosa, pero muy placentera también... Anna sabe cómo hacerlo. F I N