Laika, no me hagas repetirlo III - Relatos Eróticos

Laika, no me hagas repetirlo III

... Bueno, así me gusta, serás una buena puta traga leche. –Le dije arrodillándome delante de ella, mirándola a la cara. Satisfecho.

Fui a un lado del sofá y cogí la típica cama de perro que tienen en todas las casas y la puse al lado de mi sitio del sofá, en el suelo.

- Descansa, Laika. En una hora tengo más planes para ti.

Obvié su mirada curiosa y me tumbé en el sofá, acariciándole la cabeza. Encendí la tela y me masajeé la polla y los huevos. Pronto volvería a disparar y con esta perra cada vez me aguantaría menos. Ella estaba tumbada, de lado, en el cojín.

- Pero antes… –Le dije. –Ve a la cocina y tráeme una cerveza.

Acompañé esto último de unos azotes en el culo. Y sin inmutarse, echó a andar a cuatro patas hacia la cocina. Volví a hipnotizarme con su culo. Si se puso así cuando usaba su boca, como sería verla cuando le abriera ese agujero…