La Piara: Puente de Mayo 2023 I - Relatos Eróticos

La Piara: Puente de Mayo 2023 I

... zorritas amigas de fresa y ella misma, unas bonitas y largas colas de yegua. Para las lactantes unas de vaca lechera y para el resto, unas bonitas colitas de conejito de color rosa. Así pues y tras estar completas, las estudiantes se pusieron a hacer sus deberes, sentadas en sendos consoladores con ventosa de tal forma que sus colas quedaban fuera del asiento pero las ventosas se asentaban firmemente en las sillas de madera de las que disponía la tienda y se introducían hasta la base en sus jóvenes y depilados coñitos. Nerea y guante se pusieron a repasar un par de casos que tenían pendientes y que les esperaban al regresar del puente y mientras las más pequeñas jugaban, nodriza preparo la cena a dos cocinas, pasando de una tienda a otra tal como iba vestida, lo que provoco no pocas miradas de los vecinos y algunos comentarios obscenos de los que por allí transitaban. Por supuesto, Marcos y yo nos sentamos en el porche de la tienda más grande y nos tomamos una buena copa de Macallan 15 years mientras discutíamos a donde podíamos ir por la tarde y que planes llevaríamos a cabo. Finalmente y por unanimidad, decidimos que la mejor opción, con tanta hembra era ir a la cercana playa de Torn e improvisar algún divertimento.

- La comida esta lista, Amos – Dijo nodriza, poniéndose de rodillas ante nosotros tal como la había estado preparando hasta ahora, en la terraza de nuestra tienda - ¿Dónde quiere que la sirva?

- En el comedor de esta tienda – dije tras pasear la mirada por los alrededores. Pese a ser un camping grande, no era el Templo del sol, totalmente naturista y medio liberal y la asistencia de tanta hembra desnuda en un mismo punto, seguramente habría atraído alguna crítica envidiosa – que te ayude tu mujer a traer la otra mesa y las sillas.

- Si, Amo – respondió la tetuda y fue a buscar a guante para que le ayudara con el mobiliario.

Unos minutos después y mientras las esclavas de servicio estaban bajo la mesa, comiéndonos las pollas y los huevos a Marcos y a mí, el resto comíamos en familia y les explicamos a todas los planes que teníamos para la tarde.

- Hace tiempo que no pasamos por ahí, Amos – dijo nerea mientras picoteaba distraídamente su ensalada - ¿Creen que habrá la misma marcha que antes de la pandemia?

- Espero que sí. Me apetecerá ver que tal esta aquello. Además las chicas no lo han visto nunca y confió que harán unos cuantos amigos allí– Respondió Marcos mientras le daba unos toquecitos en la cabeza a nodriza – dulce, meada – dijo sin dejar de atender su entrecot.

Inmediatamente la gafitas abandono su puesto en la mesa y gateo rápidamente hasta la polla de mi colega, agarrándola con fuerza y metiéndosela hasta lo más profundo de su garganta. Luego tomo aire y acaricio los muslos de Marcos, que relajo la vejiga y soltó un largo chorro de meado, directamente al estomago de la hija de su amigo. Cuando su Amo termino de miccionar, la agarro por la coleta y la separo de su polla como quien se quita un condón ...