La Piara: Puente de Mayo 2023 I - Relatos Eróticos

La Piara: Puente de Mayo 2023 I

... su madre y su madrina. El video de la segunda sesión fue prácticamente un calco del de la primera, pero en esta ocasión, la joven esclava comía polla a dos carrillos mientras las dos adultas se encargaban de sendos rabos con las mismas ganas que lo hacia la fresa. Todos, antes o después, terminaban corriéndose en las tetas de las esclavas y en ocasiones llegando hasta la cara, que recibían los lechazos con gran alegría y morbo, entre comentarios obscenos de los chavales.

Para no aburriros os diré que durante las siguientes dos horas, por aquel baño pasaron casi la totalidad de los adolescentes de la piscina, ya que cada una de las estudiantes realizo un par de viajes al WC6, acompañada cada vez de un sequito de cinco pollas y una vez incluso mi hija se atrevió a hacerles de guía hasta los baños y meterse con ellos para vaciarles bien los huevos a dúo, lo que provoco un gran orgullo en su madre.

- ¿Os habéis divertido? – Le pregunte a mi mujer cuando regreso para tumbarse a mi lado.

- No ha estado nada mal – dijo terminando de esparcir los restos de semen que tenía en las ubres, como si fuera crema bronceadora – Hay algunos que son más que interesantes y eso que todavía les está saliendo el pelo en los huevos...

- Y no veas como suelta leche alguno – dijo vaca, sentándose en la siguiente hamaca. Ella también se estaba esparciendo el semen adolescente como si fuera crema bronceadora por sus tremendas ubres y por las mejillas – Las del servicio van a estar un rato recopilando datos de los videos. Quiero que los clasifiquen por santidad soltada de leche. A los que sueltan poco, ni me los mirare otra vez.

- Estáis hechas un par de guarras – les dije mientras reía con ganas…Haced el favor de ir al agua a lavaros toda esa leche que tenéis encima, que ya tengo bastante sol por hoy y quiero retirarme.

Ambas hembras se levantaron y se acercaron hasta la piscina, pero en lugar de pasar por la ducha, entraron directamente a la piscina de los toboganes, donde, con la mayor naturalidad se juntaron con el resto de cerdas y entre juegos, risas y empujones, se quitaron todo rastro de lefa de sus cuerpos. Un rato después y tras revolucionar a casi toda la piscina, las hembras salían del agua, bajo la atenta mirada de los socorristas, uno de los cuales, el más jovencito y que estaba de turno en lo alto de los toboganes, tenía una evidente trempera bajo el bañador.

Tras recoger las cosas, todos nos dirigimos hasta las tiendas. Nodriza y guante iban atrás de todo, cargando con los bártulos de las chicas, que jugaban y reían comentando, sin pudor alguno, como tenían las pollas los chavales del camping y haciendo sus quinielas de a quien llamarían y a quien no para que, si los Amos las dejábamos, las montaran.

Al llegar a las tiendas, todas se deshicieron rápidamente de los bikinis y se pusieron a hacer sus diversas tareas tras ponerse los collares y la cola que les correspondía a su posición: nerea y vaca una cola larga de zorra cada una. Las ...