Se descubre una nueva ilusión 8 - Relatos Eróticos

Se descubre una nueva ilusión 8

... en su espalda al montarla. –¡Aaah, aaah, aah! –gemía Shanna. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemía de placer Shanna. Éste no tardó en correrse, para provocarla otros orgasmos, que le provocaron un squirts soltándolo todo en el suelo. Shanna, estaba jadeando de placer, corriéndose como nunca lo había hecho, sintiéndose una puta sumisa de mierda y asquerosa. Shanna, cogió el pintalabios rojo para pintarse todos los insultos que vio en el mensaje, más otros que se le ocurrieron. Entonces, ella se puso en esa posición humillante, abriéndose de piernas, sentándose sobre sus plantas de sus pies con las manos detrás de la cabeza y su mirada al suelo, para volver a decirlo nuevamente, mientras se quedaba grabado en el vídeo del móvil.

–“Soy Shanna Shuen Liene, una esclava y perra blanca, mis Amas Angela, Yanira, les pertenezco y soy de su propiedad, su perra asquerosa que la están follando unos perros.”

Shanna cambiaba de posición según había visto en el móvil, buscando sobre posiciones de esclavos en el BDSM, así que fue copiando esas posiciones hasta que las memorizó. Shanna, se había puesto unas pinzas en cada pezón y otras en su vagina, mientras que había hecho un collar con unas medias de Samanta, que le dio una mayor excitación que usar las suyas. Una vez que hizo todas sus guarrerías, se iba a marchar cuando uno de los perros se puso delante para que lo acariciara, así que ella se acercó al perro, acariciándolo, poniéndose con el culo en pompa uno de los perros la montó de nuevo para follarla de nuevo. Shanna sentía las embestidas del perro, gimiendo de placer ya que se había acostumbrado al dolor, para sentir gozo. –¡Aaah, aaah, aah! –gemía Shanna. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemía de placer Shanna. Hasta que comenzó a excitarse, volviendo a humedecerse para tener otro orgasmo que hizo que se corriera de placer, gimiendo de gusto. –¡Aaah, aaah, aah! –gemía Shanna. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemía de placer Shanna. En seguida, el segundo perro se la hincó por el culo, pegando un gemido de dolor por las embestidas del animal, que la dejaban gritando de placer, –¡Aaah, aaah, aah! –gemía Shanna. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemía de placer Shanna.

El movimiento de la polla del perro, metiéndosela y sacándosela, hizo que se viniera de nuevo, corriéndose el perro dentro de su culo como el otro se había corrido dentro de su coño, por lo que le provoco otro orgasmo que la dejó tirada en el suelo, gimiendo de gusto y placer, con temblores junto con espasmos. Shanna se había quedado, tirada en el suelo, empezando a lamer sus fluidos para irse rápidamente, sin que se dieran cuenta. Después de unos minutos justamente cuando terminaba de limpiarlo todo con su lengua, cogió el móvil con su boca para irse a cuatro patas de la casa. Entonces, sintió que venía el ascensor, así que se metió en su casa cerrando la puerta justamente cuando la puerta del ascensor se abría para llegar sus amigas.

Ellas llegaron y vieron que las llaves estaban puestas en la cerradura, no viendo a Shanna, así que ...