1. Una vida peculiar (Capítulo final)


    Fecha: 17/03/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Rubir, Fuente: TodoRelatos

    ... coño de la otra perra. En la boca ya solo tenía el sabor de esas partes íntimas de las perras. Estaban muy bien entrenadas, no se habían movido en ningún momento, parecía que les habían quitado esa parte del cerebro que se encarga de las emociones.
    
    Sentí como alguien me agarraba del pelo y tiraba hacia atrás. Era mi ama que me volvió a subir a la mesa sobre mi espalda y me abrió las piernas mostrando toda la abertura de mi coño. Recibí un azote en él que me hizo soltar un grito. Las perras se dirigieron a la mesa y quitaron todos los platos de ella para despejarla un poco. La señora se acercó a mí y me pellizcó el clítoris con saña.
    
    -Me lo voy a pasar en grande contigo cuando te quedes un año aquí, vas a salir nueva de este sitio- me dijo con una sonrisa maquiavélica.
    
    Mi amo se subió a la mesa y me clavó la polla en la boca hasta la garganta. Comencé a tragarme ese falo mientras mi ama y la señora se turnaban para darme azotes en el coño, a cada cual más fuerte.
    
    -Vas a recibir un castigo por haberte portado tan mal este fin de semana. Ya te dijimos que nada de portarse mal con la gente que se porta bien contigo. Te vas a comer la polla de tu amo mientras la señora y yo hacemos lo que queramos. ¿Te parece bien? Me da igual la verdad.
    
    No sabía por qué me iban a castigar, no me había portado mal este fin de semana, obedecí en todo lo que me dijo la señora y me dejé hacer. Vamos, lo que llevo haciendo todo este tiempo que estoy a merced de mis amos, buscaban cualquier excusa para pegarme.
    
    Estuve lamiendo y lamiendo el rabo de mi amo mientras ellas me pinchaban, azotaban, pellizcaban los labios del coño, los tenía súper hinchados y rojos. Cuando mi amo estuvo satisfecho, sacó su polla y la clavó directamente en el culo. Aún me dolía de todo el trato que había sufrido, pero recibí esa polla con gusto. Aunque fuese sumisa me encantaba follar con mi amo (antes novio) y cada vez que me penetraba lo gozaba como una niña a la que le daban un caramelo.
    
    La señora vio esa cara de satisfacción y gozo, y para arrebatarme ese placer, agarró los pezones y tiró hacia arriba. Mi ama sujetó mi cuello y empujó sobre él para alzarme la cabeza.
    
    -Coge los aros con los dientes puta- me dijo mi ama.
    
    Tenía mucha flexibilidad y las tetas grandes como para poder llegar a hacer lo que me ordenaban. Anteriormente ya me habían ordenado lamer mis propios pezones durante lapsos de tiempo bastante grandes, pero sujetar con mis dientes los aros, nunca. Abrí la boca y me pusieron los aros sobre los dientes para que volviese a cerrar la boca. Soltaron mis pechos y estos cayeron sobre su propio peso. Tenía mis tetas intentando volver a su posición original mientras los aros de los pezones se lo impedían.
    
    Mi amo siguió taladrándome el ano sin ningún tipo de compasión, la señora y mi ama se tumbaron a mi lado formando un 69 y empezaron a jugar entre ellas, tocando sus coños, introduciendo la lengua, los dedos…
    
    El espectáculo siguió un rato más, mi amo ...
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