La Chica del Chat (2) - Relatos Eróticos

La Chica del Chat (2)

... insistía en sus besos y Elena no tardó en responder a ellos, Rocío la acercó a su cuerpo y comenzó a acariciar su cuerpo, desabrochó los 2 botones de la blusa de Elena y llegó con sus manos a sus pechos, mientras las 2 se besaban cada vez con más pasión. Sin embargo, de repente, sonó el teléfono móvil de Elena.

- Disculpa un momento - se excusó Elena.

- Claro, amor - dijo Rocío.

Elena se levantó y cogió su móvil, vió que era su marido, la llamada que llevaba toda la tarde esperando no podía llegar en un momento más inoportuno. Hizo un gesto a Rocío para que esperara.

- Hola, Ángel - contestó Elena a su esposo - ¿Cómo estás? ¿Qué tal por allá?

- Muy cansado, Elena - le respondió su marido - Llevo todo el día de aquí para allá y no te he podido llamar antes.

- No pasa nada pero me coges despierta por poco, ya me iba a dormir, también estoy muy cansada.

Rocío contemplaba divertida aquella conversación. Decidió levantarse y se colocó tras Elena, la agarró por la cintura y comenzó a besar suavemente su cuello.

- Menos mal que no te he despertado, cariño - proseguía el marido - ¿Quieres que hagamos una vídeollamada y te enseño la habitación del hotel?

- Ahora no, amor - contestaba Elena como podía entre las caricias y besos de Rocío - estamos los 2 cansados y es mejor que nos vayamos a dormir.

- ¿Te pasa algo? - preguntó Ángel - te noto algo rara.

- No te quería decir nada para no preocuparte - improviso Elena - pero he debido enfriarme y me duele la cabeza, por eso quiero acostarme.

- Entonces te dejo descansar, cariño, no te entretengo más. Hasta Mañana.

- Hasta mañana, cariño, descansa y cuidate mucho.

Elena colgó el teléfono, Rocío se puso frente a ella, le quitó el móvil de las manos, lo dejó sobre la mesa y le desabrochó del todo la blusa y la besó apasionadamente mientras le quitaba del todo dicha blusa dejándola con el sujetador, Elena respondió al beso y mordió con sus labios la lengua de Rocío mientras entraba dentro de su boca y se abrazaba muy fuerte a su joven amante. Las lenguas de las 2 se fundían en una sola. Rocío empujó a Elena sobre la cama y se echó encima de ella, mientras besaba su cuello.

- Te deseo tanto, Elena - le dijo Rocío - ¿Quieres que te haga el amor?

- Lo deseo con locura - respondió Elena.

Rocío siguió besando el cuello de Elena mientras sus brazos acariciaban sus grandes pechos, los subía y los bajaba hasta que decidió retirar el sujetador. Luego la misma Rocío se quitó su camiseta, dejando también sus pechos, no llevaba sujetador, al descubierto se puso sobre Elena de tal manera que los pezones de las 2 se rozaban, moviéndose de arriba a abajo. Elena gemía y, de vez en cuando, Rocío la besaba. Después, la joven comenzó a besar los pechos de Elena, primero el derecho, luego el izquierdo, lamía el pezón, que ya estaba duro, y lo mordía con suavidad, mirando a los ojos de una Elena que cada vez se iba poniendo más y más caliente al sentir todo lo que le hacía Rocío. Sin ...