El sexo no es como lo pintan - Relatos Eróticos

El sexo no es como lo pintan

... mundo de la escritura comenzó a atraerme más que el mundo en el que vivía y fue por ello que me gané el apodo de "Miguel Mentiras" o el "MM" como muchos solían abreviarlo.

La única persona que no me hacía mofa era mi hermana. Ella siempre se interesó por todo lo que escribía y no paraba de decirme que algún día mis ideas serían llevadas a la pantalla grande. No sabe cómo me alegraba oírle decir eso…

Creo que le agarre tanto cariño a mi hermana que desde ese entonces ella fue el personaje principal de todas mis escrituras y filmaciones. La filmaba en todo momento aunque a veces llegara a fastidiarle tanto acoso de mi parte, la personificaba en aventuras inigualables e inimaginables.

Pero hasta ese punto nunca antes le había visto como algo más que mi hermana.

El día en que mi manera de verla cambió… pues recuerdo bien que aquél día mi madre, por cuestiones económicas, no tuvo dinero para contratar a un profesional que filmara el evento de mi hermana y me pidió de favor que yo lo hiciera. Nunca lo sentí como si yo estuviera haciendo un favor sino todo lo contrario, sentí que el favor mi madre me lo había hecho al permitirme filmar tan extraordinario evento en la vida de mi hermana.

Con mi cámara lista, aguarde a que mi hermana saliera de su habitación arreglada para la ocasión. Nunca pude haber estado preparado ya que lo que vi me dejo pasmado. Cecilia se veía impactante; sumamente bella. Parecía una muñequita de porcelana.

Inmediatamente mi corazón comenzó a latir con fuerza y sentí una extraña sensación en el estómago. Quien diga que el amor a primera vista no existe es un idiota ya que si bien yo a mi hermana la veía a diario, aquella vez fue la primera ocasión que la vi como hombre y le aseguro que me enamoré.

Terminé apagando la cámara para mirarla con mis propios ojos. Era como si no creyera lo que veía. En donde demonios había quedado mi hermana a la que conocía? Frente a mí se encontraba la mujer más hermosa que había visto en toda mi vida.

No vale la pena mencionar el éxito que tuvo la filmación del evento ya que fue un total desastre. Me olvidé de mi cámara por completo y me dedique a espantarles a mi hermana los pretendientes y a todo macho que la merodeara.

Desde aquél día la escritura era una labor constante. Seguía teniendo a mi hermana como personaje principal pero ahora la describía como una bella y encantadora jovencita que se enamoraba del hombre que más le amaba en el mundo: yo.

En aquellos tiempos comenzaba a mirarla de vez cuando, cuando lucia alguna ropa ajustada o minifalda que hacían que su increíble cuerpo luciera aún mejor. Ella parecía no darse o cuenta o al menos no le daba mucha importancia ya que en más de una ocasión me sorprendió mirando su hermoso trasero y sus increíbles senos.

Cuentos, novelas, fábulas y toda clase de escritura dio paso a lo que pronto se convirtieron en relatos sexuales de mis fantasías con ella. Me masturbaba sobre las hojas de papel, sobre sus pantaletas que ...