1. La recepción del hotel: Ana, la lavaplatos de 16 años


    Fecha: 01/08/2019, Categorías: Hetero Intercambios Sexo con Maduras Autor: Dancarrera, Fuente: SexoSinTabues30

    ... dinero, está agradecida y se lo va a demostrar con su cuerpo.
    
    Sin problemas Ana se trata toda la verga, su ex pareja es un tipo bien dotado que la entrenó en el fino arte de mamar una verga, con sus manos sopesa los testículos, que son grandes y peludos, más grandes que los de su ex,
    
    Su primera verga en casi 5 años, le sabe a gloria, le llega hasta el cerebro, sus ojos miran fijamente al dueño mientras la lengua de Ana masajea la base y sube poco a poco cubriendo de saliva.
    
    La mejor mamada de su vida, esta chiquilla de 16 años es una zorra bien amaestrada, sabe comer verga mejor que muchas mujeres que le triplican la edad.
    
    Ana no se molestó en sacar la verga que se come para contestarle, acostumbrada a que se vengan en su boca siguió mamando y mamando, el grito de placer del hombre que succiona anunciaron la llegada de la leche misma que acostumbra a tirar, pero nuestro protagonista es un hombre dominante.
    
    Las manos de él sujetando su cabeza le impiden retirarse… “Al diablo, son 10 000”, con la motivación del dinero Ana comenzó a tragar toda la leche que le depositaron en su boca.
    
    La verga del hombre seguía de pie, orgullosa, lista para perforar la flor de Ana por primera vez en casi 5 años.
    
    Montada sobre un hombre que le duplica la edad, Ana, madre soltera de 16 años, recibe una verga después de casi 5 años y la está matando de gusto.
    
    Sus senos son devorados con notoria hambruna, si bien el hombre tiene un par de hermosos senos maduros a su disposición, los juveniles senos de una mujer que ha dado a luz a los 16 años son otra cosa.
    
    Rodeada por la cintura con sus brazos, el hombre jala a Ana con fuerza para meter su verga con fuerza. Por su parte Ana avienta su cuerpo hacia atrás y se deja jalar para que la penetración sea profunda y violenta.
    
    La diferencia de coger con Maru, Patricia y Ana es notoria, Maru, la más vieja se deja hacer sin cooperar demasiado, Patricia tiene su faceta sumisa en que se deja coger con violencia y su faceta donde hacen el amor. Ana es una guerrera, la juventud la obliga a pelear contra el hombre que la posee en búsqueda de su placer antes que el hombre termine y la deje sin gozar.
    
    Lo que Ana no sabe es que el hombre que la posee es un amante que le gusta hacer disfrutar a las mujeres con las que se acuesta y Ana no será la excepción. Entre gemidos, pujidos, gruñidos y toda clase de sonido gutural de placer la pareja disfruta de su coito. El alcohol relajó a Ana al punto que se dejó llevar, la privacidad y discreción de la casa en que tiene sexo con su compañero de trabajo la hacen olvidarse de su hijo, trabajo, padres y responsabilidades en general por un momento. Mientras recibe verga de su amante es una chica común de 16 años que busca un orgasmo antes de irse a casa.
    
    Su búsqueda no la hace esperar demasiado, a los 12 minutos de violento sexo su cuerpo se tensa en un orgarsmo intenso que anuncia el fin de la sequía, sus fluidos mojan a su amante que escupe semen en su juvenil ...