Pau y las prácticas en la Masía. Capítulo 19 - Relatos Eróticos

Pau y las prácticas en la Masía. Capítulo 19

... desnudo, esperaba a que siguiera.

Había visto, e incluso disfrutado, de buenos cuerpos las últimas semanas, pero lo que tenía ante mí, rozaba la perfección. Seguramente por el comentario de Piqué, aquellos ojos verdes me sonreían, los labios, especialmente el inferior, muy carnosos, la cara, con una leve barba alrededor de su mentón. Marc, era mucho más experimentado que yo con los hombres, pero también pude apreciar algo de nerviosismo en su expresión. Ese nerviosismo previo a que todo se desencadene.

Había contemplado ese torso desnudo, en algunas fotos en internet, pero tenerlo delante, era completamente distinto. Nunca pensé que lo diría, pero aquellas tetas eran perfectas. El pecho estaba definido, como a mi me gusta, no en exceso. No hacía falta tocarlo para ver que esos pectorales estaban duros. Las aureolas eran pequeñas, y oscuras, seguramente por el sol. En el centro, unos pezones pequeños, que estaban algo endurecidos. Los brazos, fibrados, definidos y con aquellos tatuajes, que tanto me excitaban.

El abdomen, donde se apreciaban los seis abdominales, acababan en aquella zona, que no había podido ver en fotos. Incluso aquellos genitales, me parecían preciosos. Gerard, no se había equivocado, el miembro, morcillón descansaba sobre su pubis, ligeramente hacia la izquierda. Al igual que el resto del cuerpo, estaba proporcionado. Claramente, no era un pollón, pero lo vi perfecto. De un tamaño medio, pero con un buen grosor. No me lo esperaba tan moreno, ni tampoco, un prepucio tan generoso, que se recogía alrededor de en la punta. Siempre me lo había imaginado circuncidado. Incluso se me escapó una media sonrisa, al verlo. No hace falta que os diga, que estaba totalmente rasurado. Aunque aún colgaban, los testículos también se veían depilados.

Podía haber seguido con el masaje como si nada, pero me apetecía empezar a jugar. Miré a Sergi y Gerard. Ellos también me miraban. Recorrí la camilla y me puse justo en la cabecera. Mi paquete casi rozaba la cabeza rapada de Marc. Estiré los brazos. Aquellos ojos verdes me miraban. Mis manos se cerraron sobre aquellas tetas y empecé a sobarlas. Estaban durísimas. Lo hacía disfrutando, despacio. Fue cuando mi dedo pulgar, rozó el pezón derecho

Mientras lo hacía, miré a los dos jugadores del sofá. Sergi, era más tímido, su mano jugaba dentro de su pantalón. Gerry, era distinto, sus pantalones ya estaban a la altura de las rodillas, su mano recorría despacio aquel rabazo, que aún no estaba completamente erecto. Parecía como si tuviera prisa..jeje.

Aquella escena en el sofá, me excitó aún más. Mis dedos, pellizcaban aquellos pezones. Me acerqué aún más al cuerpo Marc, justo hasta donde mi paquete rozaba la cabeza del defensa. Bartra, también sintió el contacto de mi rabo.

Dejé aquel pectoral. Volví a la posición inicial, en frente de la camilla. Mis manos volvieron a aquellos pectorales, pero en esta ocasión fueron bajando. Masajeaba los abdominales y con la derecha la zona del pubis ...