MI ESPOSA UNA MUJER ARDIENTE
Fecha: 08/07/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: JAPACA, Fuente: SexoSinTabues30
... sucedía.
En un momento Marina me regreso a la realidad, dejó de moverse, y se bajó de la verga de Roberto, y por primera vez pude ver aquella enorme verga, era muchísimo más grande que la mía, no sé cómo le había entrado toda en la concha a Marina. Ella lo levanto tomándolo de la mano, él la tomo por la cintura y bajo su cabeza a la altura de sus tetas, y dejo que él se saciara con esos hermosos senos, jugando con uno y otro. Como si no supiera cual elegir.
β Eso, eso, así mámame las tetas- Decía ella repetitivamente.
β Te gustan? β Le decía ella entre jadeos
β Te gustan mis teticas? β
β Así, así, parame los pezones-
β Chúpamelas- Decía ella entre jadeos y pequeños gemidos de placer.
Se volteo y empinando sus caderas le ofreció a Roberto sus nalgas a la altura de su verga, meneaba el culo invitándolo a tomarla, el sin musitar palabra la tomo de la cintura y mojando su verga con saliva metió su verga entre sus nalgas de Marina hundiéndosela en lo que a mi parecer era su vagina.
β Mmm- Exclamo ella.
β Así métemela todaβ
β Hasta el fondo burrito- Decía ella entre gemidos y jadeos
β Soy toda tuyaβ
β Tómame como tu burrita-
β Se me están hinchando las tetas- Decía mientras Roberto incrementaba la fuerza con la que la penetraba
Las nalgas de Marina golpeaban duramente contra la pelvis de Roberto, y sus senos colgando se movían al compás de las penetradas.
β Más duro burritoβ
β Así, más duro-
β ¿Te duele? β
β No, no, me gusta, métemela toda β Decía Marina, mientras estaba empinada y dócilmente entregada a Roberto.
Roberto comenzó a jadear y utilizo lo que me pareció todas sus fuerzas para darle placer a Marina.
Por momentos llegue a pensar que la lastimaría, cuando coloco una de sus manos en la nuca de Marina para inclinarla y luego él tomo de la cintura.
β Acábame dentro, quiero recibir tu semen, le dijo ella-
β Por favor acábame dentro, creo que voy a gritar, no aguanto másβ
Marina le suplicaba, sin darse cuenta que sus gemidos eran lo suficientemente fuertes acompañados del golpeteo de sus nalgas contra la pelvis de Roberto.
β Lléname, lléname, lléname- Repetía Marina
Mientras Roberto ahogaba sus gemidos, y penetraba duramente a mi esposa.
Lentamente se fue deteniendo, y los gemidos de Marina fueron cesando, quedando únicamente jadeos de cansancio.
El exploto dentro de mi esposa, y permanecieron pegados por un par de minutos y luego ella se separó aun jadeando.
β No lo puedo creer, me dejaste escurriendo β Le dijo Marina mientras se agarraba la vagina.
¿Eso era lo que querías verdad? Igualmente jadeaba de cansancio.
β Marinita te dije que te iba a gustar- Le dijo
β Si, tranquilo aquí no pasó nada- Le respondió ella mientras él seguía jugando con sus senos.
β Aplácate, Roberto, estoy exhausta- Le dijo ella mientras se retiraba.
Inmediatamente y sin pensarlo fui directo a la recamara, entre y me acosté. No pasaron más de tres minutos cuando la puerta se ...