Pérfida - Relatos Eróticos

Pérfida

... sufrimiento. Vi como ella le consolaba besandole repetidamente por su bello rostro.

Ella me vió y sin que él la viera me lanzó una mirada de "son cosas que pasan". Nita. Esa perra. No pude moverme, estaba paralizada, solo pude ver como se alejaban cogidos del brazo, sin que ella dejara de acariciarle el rostro consolándolo por el mal trago pasado.

No se como lo hicieron los camareros del café pero de repente me encontré con mi chófer metiéndome en el coche.

Del trayecto no me enteré. Solo reaccioné cuando mi madre me abrazo con su rostro bañado en lágrimas.

- Mi vida - dijo mi padre - lo que te voy a contar es Top Secret.

La empresa del padre de Nita está casi en bancarrota, sus últimos intentos de expansión a Europa fueron un fracaso. Viendo como erais de amigas había pensado en ayudarle a conseguirlo. Pero de repente la empresa de Germán empezó a proporcionarle contactos.

Eso me hizo sospechar. La empresa de Germán no es tan potente como para esa asociación, algo impulsó al padre de Germán a ayudarles con la expansión.

Mi cara lo debió decir todo. Mi padre supo que en mi mente se estaba fraguando algo.

- Mi amor - continuó diciendo mi padre - me duele tanto como a ti o más lo que te han hecho. O mejor dicho lo que te ha hecho esa simulacro de ser humano. No te precipites, esto es una lección de cara a tu futuro empresarial. No hay que precipitarse. Adopta el dicho, ten a tus amigos cerca pero más cerca a tus enemigos. Nita no va dejar que te alejes, querrá tenerte cerca para restregarte su victoria. Aprovechaté de ello. Y en cuando tengas la oportunidad atacas, no sin antes tener todo cubierto.

Como podéis imaginar dos días después comencé a recibir cantidad de llamadas y mensajes de Nita pidiendo hablar conmigo. Claro que acepté. No hizo falta que me acercase a ella, ella misma me lo pediría, mi padre tenía razón.

Vino a casa compugida. Dándome miles de excusas (no me creí ninguna).

Que si se lo encontró una vez y se puso hablar con él para saber sus intenciones para conmigo y tras saber que eran honorables le solicitó ayuda para una asignatura.

Un abrazo por aprobar el examen, unas carantoñas, un beso no planificado tras encontrarse en una cafetería. Mentiras todo mentiras. Me había atrevido a conseguir un chico sin pasar por su filtro. Un chico que era del agrado de ella.

Por suerte no siguió, si llega a seguir la hubiese estrangulado con sus propias extensiones.

-No fue intencionado, amiga mía, pasó. No supimos darnos cuenta lo que nos pasaba hasta que ocurrió.

Entiendo que no quieras verme más, pero que con el tiempo podamos volver, no digo al nivel de amistad que teníamos antes, pero volver a ser amigas. Te prometo no hablar de él en tu presencia ni tampoco presentarme con él estando tu delante.

Mordiendome la lengua sólo la respondí:

-Dame tiempo, gracias por venir. - y acompañándola a la puerta di por terminada la conversación.

La cercanía de los exámenes y las vacaciones Navideñas ...