Un paseo a la alberca - Relatos Eróticos

Un paseo a la alberca

... fuerte.

Ella ya había pasado el límite, tenía los ojos cerrados ambos con un rastro de lágrimas, su boca entreabierta con saliva saliendo ya solo pronunciaba unos débiles gemidos…no sé cuánto tiempo habrá pasado pero sentí que iba a correrme, estuve lo más que puede en su culo y cuando sentí que ya era tiempo lo saque y eyacule en toda su espalda, un poco en su culo y cabello, agotado me senté en el piso del baño, ella no se movió, se quedó echada, su culo empezó a convulsionarse y soltó un largo y sonoro pedo y empezó a cargarse sobre sí misma, una larga mierda de color negro salió de su dilatado culo y ella imperturbable, siguió en la misma posición varios minutos más.

Ya satisfecho me acerca a darle una larga olida a la caca que había echo, me levante y arregle mi ropa.

-¿estás bien amorcito?-

Ella solo atino a darme un gemido como respuesta, me acerque a verla respiraba lentamente pero tenía una sonrisa de oreja a oreja. Antes de que se me olvide le di la vuelta y le saque el vibrador de su coño, salió fácil junto con un gran chorro de orina, apague el vibrador y me lo puse a la boca lo saboreé como si fuera el dulce más delicioso que hubiera probado, me dirigí a la puerta chupando mi dulce y me voltee hacia mi novia un último instante

-Estaré con los chicos afuera, amorcito, te dejare tus cosas aquí para que te cambies, te veo en la piscina-

Fin