Un paseo a la alberca - Relatos Eróticos

Un paseo a la alberca

El autobús escolar partió a las 10:00 de la mañana, era un domingo, mis compañeros y yo estábamos yendo de viaje a una piscina de aguas termales que se encontraba en la montaña como a unas 2 horas de viaje, yo me encontraba sentado en la tercera fila de asientos hacia el lado del pasillo, mi novia estaba sentada en un poco más adelante de mí en la fila opuesta, se veía preciosa con su cabello castaño cayendo sobre sus hombros, vestía una solera celeste y unos shorts que dejaban ver sus piernas y sus hermosos pies dentro de unas sandalias negras.

El autobús partió, y todos empezamos a hablar animadamente , le pedí a un compañero que me alcanzara mi mochila, quería sacar algo de ahí, había llevado una muda de ropa, algunas cremas de mi novia, un par de toallas, una pelota de playa y unos refrescos mientras apartaba estas cosas encontré lo que estaba buscando, un pequeño control remoto lo saque y lo oculte en mi bolsillo, le pase mi mochila a mi compañero para que la guardara y mire de reojo a mi novia, estaba hablando con una amiga, esta le estaba enseñando unas fotos en su celular y las dos se reían, saque el control de mi bolsillo, me fije bien en él, tenía 5 velocidades, decidí empezar con la primera, para ver qué pasaba, apreté el botón y me puse a mirar un momento por la venta esperando a que se activara nunca había utilizado un aparto como este y no sabía cuánto tardaba en prenderse, me fije de nuevo en mi novia y vi que me miraba fijamente, su expresión había cambiado, ahora estaba seria, preocupada, aparto la mirada de mi e intentando disimular su cambio de humor volvió a prestarle atención a su amiga, la cual no se había dado cuenta de ese pequeño lapsus, mi novio cruzo sus piernas y se mordió el labio nerviosa.

-amorcito, mira lo que compre mientras venia para acá-

Mi novia que estaba escogiendo su traje de baño, se dio la vuelta y miro el aparato que sostenía en mis manos, tenía la forma de un huevo solo que un poco más grande, ella lo miro de cerca y dijo:

-oye… ¿Qué te pasa? ¿Has comprado un vibrador? Jajaja te pasas enserio- lo tomo en sus manos y con una mirada insinuante me pregunto

-¿quieres usarlo antes de que nos vengan a buscar?-

Yo me reí y quitándoselo de las manos le dije que quería que lo probáramos en el bus, que lo llevara puesto mientras íbamos a la piscina.

Me miro extrañada –no….no quiero llevarlo, voy a estar incomoda, además todos lo van a notar-

-amor, no te preocupes por eso, mira no tiene cables, es inalámbrico-

Ella seguía reacia, no quería llevar puesto el vibrador por 2 horas o más, quien sabe cuánto tardaría en llegar el bus a la piscina, me acerque a ella la abrase y la bese en sus labios, ella me beso de vuelta, nos quedamos así unos minutos, sin decir nada, solo besando.

Me aparte un poco y le susurre muy cerca de su oído

-vamos Naty, no te excita la idea un poco, sabes que te gustaría probar-

La mire a los ojos y la volvi besar, suavemente, saboreando cada centímetro de ...