Años 70: Estudiando en la Universidad 10 FINAL - Relatos Eróticos

Años 70: Estudiando en la Universidad 10 FINAL

... marido. Salvo eso, no hay problema en seguir ese plan. Tenemos todo agosto para pensar y tomar medidas. Hoy, si Iñaki no se ha enterado, duermo con Miren. Ya se me ocurrirá algo mañana.

- Vale, tercero, asumo el papel de dueño de ambas, os guste o no. Pero, hasta que encontremos una solución, va a cambiar nuestra relación, ya no seguiremos saliendo, porque me has vuelto a engañar. Pero seguirás ligada a mi porque soy tu dueño, y follarás conmigo o con otros cuando yo te lo diga, y lo harás bien, para que veas lo bonito que es un burdel. Ya pensaré que castigo te toca por haberte escapado, porque, como dueño, tengo que castigarte, para que me tengas mas miedo a mi que a tu coño. No sabes lo que me duele tener que hacerlo.

- ¿Ya no salimos? - pregunto Miren

- No, es evidente. Además, lo acabas de decir tú. No sé qué hemos arreglado desde que volvimos. No puedo castigarte queriéndote.

- Soy una gilipollas, me lo tengo merecido. ¿Cómo voy a solucionar esto? - dijo Miren

- No entiendo nada - dijo Carlos.

- Bueno Carlos, te pongo en antecedentes. Carmen me puede corregir. Carmen y Miren tienen un cierto nivel de furor uterino que es hereditario. Carmen hizo cosas como las que ha hecho Miren y tuvo la mala suerte de que algo le saliera mal, y termino secuestrada por una red de trata de personas y tuvo que estar trabajando en un prostíbulo durante un par de años. Allí conoció al padre de su actual marido, que pagó su rescate. La ayudó a recuperarse y al final se casó con su hijo. ¿Es correcto, Carmen?

- Demasiado suave.

- Bien, como digo, ella se casó, y ha sido la madre de Miren, como mujer honorable, pero seguía deudora y ligada a su suegro por ese rescate y él era su dueño y estuvieron manteniendo unas relaciones paralelas durante años en el chalet de Cercedilla, donde hemos pasado el fin de semana.

- Que fuerte - dijo Carlos

- Carlos, hijo, tu hermano es un sol y un tío muy legal y elegante. Te lo ha contado de tal forma que parece hasta bonito. Un novio que tuve me vendió a esa red, y me tuvieron prostituyéndome durante tres años, vendiéndome de un burdel a otro, a cada cual peor, donde me follaron de mil maneras, sanas y pervertidas, hasta que mi suegro me compró, para ser su amante y la esposa de su hijo. Él ha sido mi dueño, hasta que hace tres días, Fernando ha pagado por mí y ahora le pertenezco y puede hacer conmigo lo que quiera, y hemos incluido en el lote a Miren. ¿Mejor así?

- Que fuerte - dijo Carlos - ¿y cómo has pagado por ella?

- Carlos, es complicado. Pero ellas dos me pertenecen y no se pueden, ni deben, escaparse, porque si lo hacen las castigaré a las dos. Carmen ha aceptado la posición, Miren no y debo ser duro con ella.

- Que fuerte, tío. ¿Y su marido?

- No pinta nada, le tenemos que mantener engañado o en la inopia, como quieras decirlo.

- ¿Y la vas a castigar?

- Si. Bueno, pues nos vamos mañana a Cercedilla a castigarla y pensar cómo la sacamos del fango donde se ha metido, antes ...