1. El video (II)


    Fecha: 28/05/2019, Categorías: Gays Autor: Fran, Fuente: TodoRelatos

    ... recibía, encantado, en las tutorías en su despacho al fondo del pasillo de la segunda planta. Un enclave particularmente íntimo para dar rienda suelta a sus fantasías a golpe de cerrojo. En aquel despacho se había follado a una docena de estudiantes y otros tantos, afortunados, se lo habían follado a él.
    
    Aquel día se sentía sucio y vil. Necesitaba que lo castigasen porque había sido un chico malo. El rol profesor / alumno debía invertirse. Nadie mejor que Bruno para darle un escarmiento. Pelirrojo, alto, fornido, lucía un bigote trasnochado que contrastaba con los rizos de su cabello, casi rastas. Destaca en su aspecto y en su manera de comportarse: era el listo de la clase —que no el empollón— y lo sabía. A sus veintitrés años presumía de un expediente modélico en un grado doble de Derecho y ADE en una universidad pública cuando por todos era sabido que su padre podría haberse permitido enviarle a estudiar a la facultad más elitista del planeta.
    
    —Te veo en mi despacho —le insinuó interceptándole por el pasillo—. Tengo que comentar contigo algo relacionado con tu ensayo sobre el ordenamiento jurídico.
    
    Bruno sabía perfectamente que aquello era una excusa. Ninguno de sus trabajos había recibido crítica alguna y una calificación por debajo del diez. De hecho, esa misma mañana le habían nominado para el cuadro de honor, y ahora su profesor favorito le citaba para que le diera por el culo, así que la jornada no podía ir mejor.
    
    Apoyado sobre un escritorio de madera de cedro de estilo inglés con un tapete de cuero verde, el profesor, con los pantalones arrugados a la altura de los tobillos, recibía la polla del pelirrojo sin más preámbulos que un cordial saludo y un poco de estimulación táctil antes de ofrecerle su ojete. En silencio, ahogando los gemidos como en el video para que no se reconociera su voz, aunque ahora simplemente se trataba de un asunto de máxima discreción. Esto no significaba que no lo estuviera disfrutando; todo lo contrario. Que aquel alumno imberbe le taladrara el ojal con violencia, tomando el control, intercambiándose los papeles, no podía ponerle más cachondo. Su polla, larga y fina como un reflejo de su cuerpo, le embestía con una rudeza nacida de la furia más que del placer, de la rabia cuando le hizo callar en clase delante de todos sus compañeros, henchido de razón, osando contradecir a toda una eminencia del campus. A Pedro aquello le daba igual. Que ese deslenguado arrogante se encontrase en su despacho respondía a un solo objetivo, el cual estaba cumpliendo con creces a tenor del placer otorgado por sus enérgicas embestidas, rudas como el detalle de agarrarle del pelo tirando hacia él. Que se desquitase todo cuanto quisiese, solo necesitaba de él su pollón clavándole en lo más profundo, orgullo fuera. Aún recordaba aquel acercamiento en los baños cercanos a su despacho, uno al lado del otro en sendos urinarios de pared donde percibió la mirada indiscreta del joven y una mueca libertina que exponía sus ...
«1...345...9»