1. El último del año


    Fecha: 12/05/2019, Categorías: Infidelidad Autor: Hansberville, Fuente: CuentoRelatos

    ... oportunidades. Ella sabía perfectamente lo que provocaba en los hombres. Era una chica guapa, con muy buen cuerpo. Quizá algo escasa de pecho pero compensado con un maravilloso culo trabajado a base de horas de gimnasio. Allí mismo cruzaba miradas con otros usuarios de cuerpos espectaculares con los que sí había fantaseado. Pero nunca más allá.
    
    Lo más lejos que había llegado era a masturbarse de manera descuidada en la terraza de la casa de sus padres sin darse cuenta que un vecino maduro la observaba. Aunque se reconocía que en un primer momento pasó vergüenza ahora, en la perspectiva del tiempo, era una de las experiencias más excitantes que había disfrutado.
    
    Con ese recuerdo se levanta de la cama la mañana del último día del año de la pandemia. Al puto 2020 solo le quedaban horas para finar. Las medidas anti Covid seguían siendo muy restrictivas. Cafeterías abiertas solo hasta las 18 horas, número máximo por mesas, prohibidas las aglomeraciones. Y la petición de que mantenerse en casa era la mejor opción para toda la población. Pocas opciones de diversión para el último día del año.
    
    Ana se metió en la ducha. Abrió el grifo del agua caliente y dejó que ésta recorriese su precioso cuerpo. Echó la cabeza hacia atrás y dejó que su melena cayese por su espalda. La curvatura hacía se pronunciase su culo. Unas espectaculares nalgas de jugadora de vóley brasileña se reflejaban en el espejo de enfrente. Ana se gustó. Se sintió muy sexy:
    
    -Joder… este Carlos es gilipollas. Si yo fuera un tío me estaría follando todo el día… Capullo.
    
    El agua utilizaba su cuerpo a modo de trampolín. Corría por su espalda y saltaba al llegar a su culo. Lo mismo sucedía por delante. Donde sus pezones habían reaccionado a su pensamiento endureciéndose y retorciéndose sobre sí mismos. Ahora sus aureolas se encogían provocando que sus pezones saliesen hacia fuera de manera provocadora. Las gotas de agua golpeaban sobre ellos saltando al vacío. Ana se acarició las tetas de manera sensual antes de pellizcárselos y tirar de ellos hasta provocarse dolor. De inmediato su entrepierna aumentó de temperatura.
    
    Ana sentía como su clítoris palpitaba. Llevó su mano derecha hacia su entrepierna y comenzó a acariciarse. Sus vellos púbicos parecían más oscuros estando mojados. El perfilado triangulo sobre su monte de Venus era la antesala de unos labios, ahora henchidos por la excitación, no demasiado gruesos que cerraban perfectamente una vagina rosada. Sus dedos recorrieron la rajita que los separaba y acertó a diferenciar la textura entre los líquidos que mojaban su coño. El agua bajaba por sus piernas pero sus dedos se pringaron con el fluido viscoso que manaba de su interior. Con los ojos cerrados y suspirando, los movió instintivamente hacia su botón recordando a aquel maduro que la vio pajearse en la terraza durante el confinamiento. Movió los dedos en un movimiento circular sobre su clítoris dándose un placer inmediato.
    
    El chorro de agua caliente caía sobre ella ...
«1234...9»