Historias del complejo turístico (53) - Relatos Eróticos

Historias del complejo turístico (53)

... saqué un pasaje para San Bernardo para mañana a las ocho menos cinco de la mañana, no hay colectivo para hoy, y San Bernardo está pegado a La Lucila!

-LORENA: ¿Le dijiste que hablaste conmigo?

-INES: No, y tampoco le conté nada de lo de Paola, andá a buscarlo y habla con él, me dijo que cuando volviera a La Plata, seguramente tendría que hablar con vos por el tema del divorcio y la casa.

-LORENA: ¿Y si no quiere verme? ¿Y si no me cree?

-INES: Inténtalo! Demostrale que te importa! Si es necesario, le súplicas que te escuche! También te traje el teléfono, mostrale la conversación con Paola y los mensajes con Cristian, contale todo sin omitir nada, y mostrale el video completo de la despedida de soltera, cuando lo vea se va a dar cuenta de que no tuviste intención, que fuiste obligada!

-LORENA: Tengo miedo Inés!

-INES: No importa! Jugate por lo que sentís por él! Contale toda la verdad! Yo sé que te va a escuchar y va a entender!

-LORENA: Dios quiera tengas razón! Gracias Inés!

-INES: Tiene otro número de teléfono, ahí te lo paso, pero no lo llames, me dijo que por ahora no se lo diera a nadie, tenelo agendado por cualquier cosa. Te traje un poco de dinero también, por si no tenías.

-LORENA: Gracias Inés, pero no hace falta! No sé cómo voy a poder agradecerte esto!

-INES: Fácil! Volviendo con él!

Conversamos un momento más, y luego se fue para su casa.

Estuve todo el día muy nerviosa, esa misma noche después de comer un sándwich, me preparé un bolso con una muda de ropa, quería que las horas se pasarán rápido, casi no pude pegar un ojo en toda la noche.

A las siete y media de la mañana del domingo, ya estaba en la terminal de ómnibus.

El colectivo salió puntual, y antes del mediodía ya estaba en San Bernardo, le pregunté a un policía en la terminal, cómo podría llegar a la Lucila del Mar, y me dijo que desde allí mismo, podía tomar un colectivo local.

Antes de la una y media, encontré el complejo, toqué el timbre, y desde la casa principal, vi caminar un hombre hacia el portón de entrada.

-GABRIEL: Buenos días señorita! Soy Gabriel, ¿en qué puedo ayudarla?

-LORENA: Buenos días señor! Estoy buscando a Mauro Errecarte! ¿Está hospedado aquí verdad?

-GABRIEL: Disculpe señorita, pero las políticas del complejo, no me permiten dar información de los huéspedes.

-LORENA: Yo soy Lorena su esposa, y necesito hablar tan solo un momento con él, hubo un malentendido, y necesito aclarárselo! Por favor!

Me miró por un momento sin decir nada y los ojos se me llenaron de lágrimas.

-GABRIEL: ¿Lorena verdad?

-LORENA: Si, soy Lorena! Eso quiere decir que Mauro está aquí!

-GABRIEL: Lamento decirte Lorena, que Mauro estuvo aquí, pero esta mañana temprano dejó el complejo.

Continuará…