1. Cuando mamá no está en casa


    Fecha: 12/03/2019, Categorías: Transexuales Autor: Liver96, Fuente: CuentoRelatos

    ... tiempo que su polla se convulsionaba dentro de él, y un torrente de semen fluyó hasta lo más profundo, uno, dos, tres, hasta seis trallazos de semen caliente sintió Kevin inundando su ser, llenándolo por completo y dejándolo extasiado. Lydia se recostó encima del muchacho, sus tetas aplastándose contra su espalda, ambos gemían agotados y sudaban considerablemente. Kevin aun gemía sutilmente mientras toda la polla de su tutora aún se encontraba hundida en su culo, y era tanto el semen depositado dentro de Kevin que se empezó a filtrar un poco e iba a parar a sus testículos y luego en la cama.
    
    Lydia suspiró, complacida con el resultado de su ‘’tutoría’’ con Kevin, y se mantenía dentro del chico. ‘’Ah… sí… así es como follo a todos… duro y profundo… así te follare de ahora en adelante Kevin…’’ murmuró Lydia sonriente a un Kevin totalmente desconectado de la realidad.
    
    ‘’Mientras tu culo se mantenga así de apretado… continuaré dándote lecciones especiales…’’ prometió la chica.
    
    Lydia se incorporó lentamente y con un ‘plop’, saco su polla del culo de Kevin. El semen depositado comenzó a salir y a caer sobre la cama, la tranca de Lydia también estaba cubierta de su leche, Kevin permaneció inmóvil mientras Lydia observaba su ano enrojecido y ensanchado. ‘’Con mi leche llenando tu interior, eres oficialmente mío, puta…’’ dijo Lydia. La muchacha limpió el semen de su polla con un short suyo y salió de la habitación. Kevin seguía tratando de recuperar las fuerzas pero apenas podía moverse, sin la polla de Lydia; solo sentía un terrible y enorme vacío en su interior y su ano abierto de par en par, su esfínter palpitaba pero ya más relajado después de la intensa culeada recibida.
    
    Lydia regresó a los pocos minutos, se había dado un baño y comenzó a ponerse su ropa y a guardar sus libros en el bolso azul. Kevin aún seguía debilitado boca abajo en su cama, tal como Lydia lo había dejado antes de ir al baño, la tutora se terminó de vestir y le dijo.
    
    ‘’Tendremos más diversión desde ahora. No olvides limpiar este desastre antes de que tu mamá regrese.’’
    
    La tutora recogió sus lentes del suelo y se los puso, siguió sonriendo de camino a la puerta y la abrió. Mirándolo por última vez, se ajustó un poco sus lentes y se despidió de Kevin. ‘’Hasta pronto, Kevin…’’ dijo Lydia, y salió de la habitación dejando al pobre chico solo.
    
    Kevin tardó una media hora en recuperarse. Por supuesto, lo siguiente fue intentar levantarse, cosa que le costó a horrores pero una vez que pudo dar un paso, empezó a tratar de arreglar su habitación; su madre no tardaría en llegar. Cambió la sabana de su cama y acomodó sus cosas, luego se metió al baño para darse una buena ducha.
    
    Limpió su ano (lo mejor que pudo, pues lo tenía muy sensible) y salió de la ducha, caminaba con mucha dificultad y percibía que no podría sentarse así que se acostó. Su cabeza era un torbellino de imágenes confusas (la polla de Lydia, su cuerpo, sus tetas) combinado con las nuevas sensaciones ...