1. El amigo de la familia me dio en mi cuarto Parte I


    Fecha: 09/11/2019, Categorías: Gays Autor: Pakami, Fuente: TodoRelatos

    Honestamente, nunca pennsé que estaría escribiendo algo como este para el internet. La única razón por la que lo hago es porque no tengo a nadie a quién contarle todo lo que ha estado sucediendo. Siento que voy a explotar si no lo comparto. Esto sucedió unos dos meses atrás. Me lo he estado guardando, pero creo que ha llegado la hora de mas personas sepan al respecto.
    
    Por razones de seguridad, voy a usar nombres falsos. Así que Mauro tiene probablemente como treinta y cuatro a treinta y ocho años. Él ha sido un amigo de la familia como por un año. Mis padres lo conocieron a él y a su esposa en la iglesia. Típico de mis padres es que les encanta jugar a la pareja mayor y hacer de mentores. Siempre están a la búsqueda de la pareja joven recién llegada. Usualmente les dura unos meses antes de que pase la novedad y se olviden. Por suerte para mí, Mauro y su esposa han permanecido mas que los otros.
    
    Mauro es la clase de hombre sobre la que amo pajearme. Es de esos machos que han estado yendo al gym como por los últimos diez años porque es una parte demasiado grande de ellos como para dejarla. Obvio que como resultado tiene una figura de triángulo invertido casi perfecta, y ama usar ropa para demostrarlo. Hasta el momento en que sucedió lo que les voy a contar, nunca lo había visto sin camisa, pero se pueden imaginar que mi mente tenía una muy buena idea hecha de cómo se vería.
    
    Desde que él y su esposa empezaron a venir a mi casa, yo tenía muchas dificultades intentando evitar que mis ojos se deslicen por su alta figura, o su rostro tan absurdamente apuesto. Creo que a él no le importaba. Cada vez que me atrapaba con mis babas por el piso, mirándolo, no hacía más que regalarme una sonrisa y un guiño que me hacía sentir tan caliente que me sorprende que no me saliera humo de las orejas. Si fuese una mujer, estoy seguro de que me podría dejar embarazado solo con ese gesto. Y estoy seguro porque su mujer quedó embarazada unos siete meses atrás, así que ya ven.
    
    De hecho, ahí fue cuando empecé a notar un cambio. Es como si él hubiese comenzado a esperar activamente a que yo intente echarle una ojeada solo para poder devolverme esa sonrisa que me derrite. Cada vez. Creo que pasamos de que me atrapara solo un par de veces por ocasión, a quedarme rojo como tomate cada cinco minutos. También empecé a notar que sus camisas tenían un botón extra desprendido comparado a cómo las usaba él normalmente, y hubiese jurado que sus jeans se habían vuelto más ajustados de repente. Y les juro que esto es cierto, pero creo que durante un almuerzo, él me pateó por debajo de la mesa.
    
    En fin, estoy dando preámbulos porque me pone muy nervioso escribir esto. Creo que lo último que me gustaría mencionar es que yo no tengo un cuerpazo, ni soy particularmente apuesto. Soy delgado, gay y crecí en un hogar religioso. Lo que significa que al día de hoy todavía estoy en el armario.
    
    Ahora si, a lo que vinieron. Como dije antes, esto sucedió hace un par de meses. Fue ...
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