Zoofilia salvaje y cruel - Relatos Eróticos

Zoofilia salvaje y cruel

... tamaño pueden hacer mucho daño, hicimos lo mejor que pudimos, vamos a ver que resulta, te vamos a cuidar muy bien”, Don Jaime quería que durara lo más posible en mi último destino, me dijo. Me mostró una foto de mi ojete, estaba hermoso, apenas una rajita, ojete de marica adolescente, me lo habían reconstruido. Pero eso era por fuera...

El cuidado con mi salud y mi cuerpo es total, hay un equipo comandado por la Dra. Leonor que me atiende permanentemente. La única parte de mi cuerpo que puede ser usada sexualmente es mi boca, y vaya si la aprovechan. No cagan en ella por el trabajo de limpiar después, pero después de cagar usan mi lengua de papel sanitario, todo el tiempo. Varias veces al día chupo vergas, coños y culos, trago lefa y meada.

La tortura mental si esta permitida y es alentada por Don Jaime, está a cargo de la Dra. Leonor, que se deleita con ella. Su combinación de sonrisa dulce y modos amorosos con sadismo cruel y lujurioso me hiela la sangre, es una tortura en si misma. Ella controla los microchips desde su tablet, también controla dos grandes pantallas que hay a los pies de mi cama, una con escenas de mi violación y la otra con videos del tipo que voy a tener que protagonizar. La gente que me atiende todo el tiempo me habla de mi violación y de las cosas que me van a hacer para los videos.

También controlan mi mente, no se que usan, drogas, sugestión hipnótica, no entiendo nada de eso, pero Don Jaime tiene acceso a cualquier método o tecnología y ciertamente no duda en usarlos. Pienso permanentemente en sexo con animales, vergas enormes, tengo sueños eróticos todas las noches, revivo mi violación en los sueños siento todo el dolor, pero disfruto las vergas y pido más, me despierto bañado en sudor y con lefa de dos o tres orgasmos en las sabanas.

A la Dra. Leonor le gusta follar al lado de mi cama, folla con cualquiera, hombres, mujeres, varios a la vez, cualquier agujero, es activa o pasiva. Y mientras ella folla y yo veo las pantallas ella se excita dándome choques eléctricos y orgasmos anales. Y yo trago la lefa saliendo de sus agujeros. Trago lefa saliendo de agujeros de todos los que follan en el equipo medico y de seguridad. Y ahí viene la Dra. Leonor para que le coma el coño otra vez, es insaciable...

Epilogo por la Dra. Leonor:Escribo este epilogo a su historia. Sin decirle nada le pusimos un sedativo conectado a una de las vías intravenosas. Me monté sobre su cara y le hice comerme el coño, era realmente bueno, me dio dos orgasmos en pocos minutos. Cuando iba camino al tercero liberé el sedativo para inyección, no demoró en apagarse. Termine de gozar masturbándome con su cara. Llamé a los enfermeros y se lo llevaron, lo iban a embarcar en un buque de carga rumbo a su destino final, me hubiera gustado verlo cuando despierte en una bodega desconocida de un buque inmundo. Calculamos que en algunas semanas van a empezar a aparecer los videos en la dark web. Me excita mucho la idea de ver su sufrimiento.