1. El niño del supermercado


    Fecha: 12/10/2019, Categorías: Gays Autor: Pavic, Fuente: SexoSinTabues30

    ... supermercado- -Ahhh, ay, aaayy, ayyy señor, señor, haga conmigo lo que quiera- -Te voy a coger muchacho, te la voy a meter, aquí y ahora- le decía mientras apretaba con fuerza sus tetitas adolescentes. -Hágale, métamela, métamela señor- pedía mientras frotaba su culito con mi verga. -Claro que te la voy a meter, pero antes me la vas a mamar, aunque sea por cinco minutos, pero me la vas a mamar, de rodillas al suelo putita.
    
    Antes de apoyar sus rodillas al suelo ya me había engullido hasta el fondo todo el miembro, dejándome escapar un grito ronco que pretendía retener conmigo, pero lo cual fue imposible, pues el muchacho chupaba con una exquisitez tal que casi me hizo acabarle en su boca en dos tiempos. Me contuve, respire profundo, y me deleité viendo a mi joven amante succionar el miembro con tal velocidad y desespero, como si fuese la última verga de su vida, con sus salivas recorriendo gota a gota el tronco de mi pene, y mis vellos pubianos enredándose en el ángulo de sus labios, en donde más de uno se le quedaba incrustado. No me faltaba mucho más para terminar, y aunque me hubiese encantado llenarle de leche su paladar y hacerlo atragantarse con mi nata, lo puse de pie, le quité sus shorts dejándolo solo con su calzado, y levanté una de sus piernas al aire para apoyar su pie en uno de los urinarios, dejándome su culito abierto a disposición, ubicando mi hinchadísimo glande en la zona de su rojizo ano, no sin antes untarlo con el lubricante de bolsillo que andaba trayendo, y empujar centímetro a centímetro todo mi falo erecto, el cual se desplazó lentamente en su interior con exquisita parsimonia, apretadito, resbaladizo y rico, hasta clavarlo en su totalidad con mi pubis disfrutando del contacto con sus esponjosas nalgas rebosantes:
    
    -Aaaaaaaayy, aaaaaayyy, señor, señor, señor, aaaaayyyyyyyy- gemía el chico. -Ufff, pero qué delicia de culo niño, te pasaste, uuufff, uuuffff, realmente espectacular- bufaba yo. -Despacito señor, despacito por favor- pedía él. -Tú no eres virgen chico, dime ¿con quién has estado cogiendo?- le pregunté. -Con mi profesor de natación señor, me revienta el culo todos los jueves- respondió -Pero hoy es jueves, ¿o sea que ya te cogieron hoy?- – No señor, hoy no tuve clases de natación- dijo él -Ya veo- le dije mientras el “splash” de la culeada comenzaba sonar en ritmo de gota de agua- hoy no te cogieron, y por eso en los pasillos te rascabas el culo a cada rato, vaya si eres un putazo. -Despacio señor, por favor, despacio- suplicaba mientras el “splash” aumentaba gradualmente su intensidad. -No podemos, tenemos poco tiempo muchacho, disfrútalo mientras dure- le dije
    
    Y así, comencé a bombear tan fuerte y profundo como pude, con delicado y calculado embiste, pero profundo, rico y sonoro. Mi verga aumentaba sus palpitaciones cada vez que chocaba mi ingle con su enorme trasero blanco, de porcelana, con el chico gimiendo ya sin recelo, no nos quedaba mucho tiempo más para aguantar tanto placer desatado, la ...