Crónicas de una prostituta 9 - Relatos Eróticos

Crónicas de una prostituta 9

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Entiendo mces con cuidado saco el plug de madera y látigo de mi culo . Metió la primera allí , y la segunda en mi coño , lo puso en una intencidad baja , pero igual se sentí fuerte mi culo y vagina se sentían repletas , mi piel era de gallina y en mi frente corría frío el sudor.

Yo babeaba cómo lo hice en el auto , gritaba y gemia , todo esto se mezclaba con el sonido del motor.

Volvió a subir la intensidad , ahora las dos entraban y salían rápidamente , yo gritaba tan fuerte , Marcelo se posicionó atrás de mi cabeza y comenzó a cachetear me , mi cara ardía y mi coño escurrirá fluidos. Y cuando menos me lo espere ya estaba retorciendome como gusano , y Marcelo seguía tirando cachetadas y seguía tirando de las pesas en mis pezones.

Y la velocidad la sentía latente y rápida el ritmo me encantaba , yo decía que estaba delicioso. Y solo paso un squirt profundo , y seguido de un orgasmo que me dejó convulsionando y explicando saliva de mi boca .

Uno de los mejores orgasmos , Pero Marcelo solo bajo la intensidad de la máquina y no saco las pollss ya chorriantes y brillantes por los fluidos.

Otra vez fue hacia un cajón, saco una bomba succionadora . Iba a volver a torturar mi clítoris, lo succionó sin piedad lo hincho y lo dejo rosado , expuesto y sensible. Con un vibrador al estilo micrófono, comenzó a tocarlo subió la intensidad otra vez de la destruye colos 3000. Y todo mi cuerpo vibraba , sudaba hasta lo último de mi ser , me sentí exhausta , y solo podía babear , de tanto placer sentía que podría desmayarme.

Cuando mi clítoris comenzó a bajar su inflamación, lo volvió a succionar, me saco de mi casa inconciencia.

Cuando se canso de ese espectáculo , paro la máquina , me desató de mis ataduras me llevo en brazos hacia la cama con dorsel. Me volvió a atar en en la cama pero dejo mi culo en pompa , y ya podía meter su puño en mi culo , y así lo hizo lo hizo con saña yo gritaba y gritaba z pero me encantaba , lo disfrutaba , disfrutaba esa humillación .

Cuando sintió listo me desató me puso boca arriba y me comenzó a penetrar vaginalmente su pene y un dildo rígido . Tenía mi coñito tan dilatado que no sentía mucho que me abriera. Pero el dildo y su pene causaban una fricción que me estaba volviendo loca. y otra vez me causo squirt.

Yo me desmaye , desperté al otro día con pomada en todo el cuerpo. Entro con una bandeja de desayuno , comimos juntos y hablamos. Me dió un sobre grueso y una bolsa de lujo. Lo mejor que me pudo pasar .

A decir verdad me encanta tener clientes que se comportan como sugar daddy. Le dan un valor al trabajo que uno brinda. Y no solo como un pedazo de carne que puedes comprar. Adoro a los clientes que les gusta vivir una experiencia y un momento agradable y no solo sexo. Que valoran todo lo que conlleva tener sexo.

Besos 💋

Atentamente su protitura favorita