1. Historia de una hotwife: Mañanero con el señor del gas


    Fecha: 14/09/2024, Categorías: Infidelidad Autor: Ishtar Flores, Fuente: CuentoRelatos

    ... por favor: Dándome un par de nalgadas, dijo, ni madres cabrona quiero romperte el culo y ahora vas aguantar toda mi verga.
    
    Acto seguido puso mis manos detrás de mi espalda y colocando de nuevo su verga en la entrada de mi ano dejo caer todo su peso encima de mí logrando enterrar todo su pito gordo dentro de mí, lo cual hizo que obviamente soltara un grito de dolor pidiéndole que me la sacara. Yo: Nooo, baby así no… por favor sácamela porque me duele… me duele mucho sácamela. Pero tal parece que le pedí lo contrario porque comenzó a darme unas bombeadas bastante duras y profundas mientras tanto yo ahogaba mis gemidos de dolor y placer con la almohada del sillón.
    
    Después de unos minutos de ver que realmente este hombre quería romperme el culo sin piedad no me quedo más que comenzar a disfrutar jajaja y aceptar que para eso lo había seducido… Unos 5 minutos después me dice: Repartidor de gas: Ponte de perrito en la orilla del sillón y apenas estaba acomodándome cuando me agarra de la cadera y entierra toda su verga dentro de mí sin avisarme…
    
    En ese momento creí que se me salían los ojos de tremendo empujón de verga que me dio y nalgueándome continuo con sus embestidas como un verdadero macho semental: ¿Te gusta puta?… ¿Te gusta cómo te estoy cogiendo? ¿Esto querías verdad? Yo: Si cabron, esto quería… al verte me di cuenta que eras todo un cabron… sigue por favor dame más duro. El añadió; cabrona no quieres que te deje leche en la vagina por eso estoy desquitándome con tu ano.
    
    El repartidor de gas, comenzó a nalguearme muy fuerte y a jalarme el cabello, y me dijo pinche puta… desde que abriste la puerta, estuve pensando en tenerte así y ahora eres solo mía cabrona… no quiero que andes de puta ofreciéndote a cuanto cabron entra en tu casa oíste, me ordenaba como si fuera mi dueño. Yo solamente, dije, con gemidos de placer, si papito de hoy en adelante seré solo tu puta y tu mi macho para que hagas conmigo lo que quieras. Aquel semental, sonrió y dijo, así me gusta… que sean obedientes las pinches putas… además para eso están.
    
    Después de unos 15 minutos que me estuvo montando así en la orilla del sillón me hizo acostarme de nuevo. Acto seguido me empezó a tocar las nalgas, con una mano, mientras que con la otra se acomodaba su pene en mi vagina, me empezó a penetrar despacio, yo estaba con los ojos llorosos, sabiendo la idea que estaba siendo penetrada por un hombre desconocido en mi propia casa, así que empezó a penetrarme con fuerza haciéndome gritar moderadamente, después me tomo del cabello con una mano y con la otra me levanto una pierna, esto era para poder penetrarme más cómodamente, sentía unos jalones en mi cabello que me hacían arquear la espalda, soltó mi cabello y con su mano me tomo del cuello y acerco su cabeza a la mía, el empezó a besarme los labios y lamerme la cara y la oreja y a decirme varias cosas…
    
    Estas bien bonita y buena, que rica señora me estoy cogiendo, siempre quise cogerme una puta ama de casa, te voy a ...