Mi trabajo 4. - Relatos Eróticos

Mi trabajo 4.

... para mi fortuna su hijo se cayó y comenzó a llorar, entonces aproveché ese momento para darle su recibo, orden de venta y la tarjeta la cual especificaba mi nombre, personalidad sumisa y mi disponibilidad para el anal, oral, sexo convencional y el dolor con tal de complacer sus deseos por un costo extra. Se le queda viendo por unos segundos mientras me apeno al retomar conciencia de la situación.

Guarda la tarjeta en su bolsa trasera, supongo que es para evitar que la vea su esposa o algo para después retirarse.

Es jueves, va saliendo lo que creía era el último cliente el cual se aseguró de meter toda su corrida a mi ano con sus dedos después de venirse sobre el, asi como de llevarse mi ropa interior lo que significa que tengo que ir a casa procurando que no se levante mi falda y con rapidez. Le hubiera otorgado la tarjeta de los servicios exclusivos pero en ningún momento se separó de mi, estuvo con su dedo en mi vagina todo el rato y no me sentí cómoda aunque me gustó.

Después de hacerme un lavado en el baño veo entrar solo al señor que vino a inicios de semana. Se me olvida por un momento que le otorgue la tarjeta y sus privilegios que esta conlleva, así que voy a la barra registradora y le comento que estoy apunto de cerrar la tienda y si quiere saber cómo va su orden debería de regresar mañana.

No responde nada, se pone detrás de mi. El señor es bastante grande y más alto que yo, mido 1.60 y él (calculo) 1.85.

Con una de sus manos me toma de la cintura mientras que la otra la pasa por mi boca y susurrando me dice "te haré todo lo que a mi esposa no le hago, así que ve y cierra a menos que quieras que alguien vea como te hago mía porque será una noche larga"

Cierro con rapidez la tienda. Regreso a él, me dice que me ponga de rodillas con la boca abierta. Al momento él también se pone sobre una rodilla, me toma del cuello y me escupe directamente en la boca para después darme dos bofetadas.

-Cómo se dice después de que te dan algo?.- me ahorca con más fuerza al mismo tiempo que siento más excitación.

Hablo con una voz partida, de una manera muy tenue apenas logro decir unas palabras-Gra...gracias, señor.-

Me bofetea nuevamente -Llámame papi o tendremos problemas- Me da otra bofetada -Entonces, ¿Cómo se dice?-

-Muchas gracias, papi.- Viéndolo con deseo e inocencia ante lo que está pasando.

Se levanta tomando mi largo cabello, baja sus pantalones y ropa interior para dejar al exterior su gran polla erecta, la acerca a mi cara solo para golpearme con ella, después la pone en mi boca sin meterla en ella. La lamo un poco con mi lengua pero al tratar de tomarla con mis manos me abofetea nuevamente.

-Nunca te dije que podías tocarla con las manos.- entonces la toco con mi cara, la paso por mi nariz y cachetes así como por mis labios sin meterla a mi boca como si la estuviera...adorando(?). La beso con suavidad y le doy unas lamidas un poco tímidas mientras yo misma mantengo mis manos en mi espalda.

Sujetando mi ...