Por el bien de la familia II - Relatos Eróticos

Por el bien de la familia II

... refieres? – dijo seria.

Andrés: Mirad chicos, yo amo a vuestra madre con locura, pero ya la tengo muy vista, no se si me entendéis, por lo que mi deseo sexual por ella ha bajado considerablemente, aunque es una diosa – explicó – Ahora, para ponerme a tono y poder follar con ella necesito estímulo y no me vale con juegos sexuales o de roles, necesito ver a mi mujer ser follada por otro hombre – confesó – Eso y que su fantasía me vuelve loco – dijo pícaro.

Sergio: ¿Qué fantasía? – dijo curioso.

Lisa: Veréis, siempre he sentido que mi amor por Sergio iba más allá del maternal, y desde que creciste me siento celosa cada vez que te veo con alguna amigo – le dijo a su hijo – Y desde hace algún tiempo, cuando follo con papá me imagino que eres tú el que me follas.

Eva: Entonces, ¿tu fantasía es follar con tu hijo? – dijo entendiéndolo todo.

Lisa; Sí, pero hay más que eso – dijo seria – No me conformo con solo follar, quiero ser la mujer de Sergio.

Eva: Pero eso es imposible – dijo seria – Sabes que él tiene una “novia”, ¿no?

Lisa: Lo sé – dijo muy seria – Y sé que se echará novia formal en algún momento, pero no me importa siempre que yo sea su mujer – dijo mirándolo a él.

Sergio: Entonces, ¿no te importa si me echo novia siempre que te folle a ti también? – dijo muy morboso.

Lisa: Sí, siempre que yo, tu madre, siga siendo tu mujer, estoy dispuesta a compartirte, incluso con tu hermana – dijo seria.

Eva: Pero mamá, no sé por qué…

Lisa: Llevo años observándote, sois mis hijos – dijo tierna – Sé que deseas a tu hermano y fantaseas con tu padre, aunque no te atrevas a ir a más, hasta ahora, por tu moral y tu ética – dijo divertida.

Andrés: Lo sabemos, cielo, por eso no hemos querido forzarte, he dejado que todo siguiera su curso – dijo abrazándola tierno – Lo bueno de la fantasía de mamá, es que yo también puedo follarme a la buenorra de mi hija – rio.

Miguel: Es completamente normal que fantasees con tu padre, Eva, los niños toman como referente a sus padres para encontrar una pareja que se parezca a ellos, y si no encuentran a nadie, digamos que ellos se convierten en sus “parejas ideales”, creando así una especie de fijación sexual con ellos – explicó – Es normal.

Lisa: Ningún niñato le llega a Andrés a la altura del zapato – dijo seria, guiñándole un ojo a su hija – Salvo la carne de su carne – dijo abrazando tierna a su hijo.

Miguel: Pero el punto es, que aceptéis esta nueva realidad como familia – dijo serio – Todo seguirá como hasta ahora, pero todo a su vez cambiará – explicó - ¿Estáis dispuestos?

Sergio: Yo no tengo problema en follar a mamá – dijo riendo – Si encima me puedo follar de vez en cuando a mi preciosa hermanita, por mí, de acuerdo.

Lisa: No se trata solo de follar, hijo, quiero ser tu mujer, darte hijos, ser tu juguete sexual al que uses a tu antojo cual muñeca de plástico – dijo para que entendiera – Ser marido y mujer a todos los efectos, dormirías conmigo y dentro de casa, serías mi ...