1. Mi sobrino Alex


    Fecha: 25/09/2019, Categorías: Incesto Autor: Sete, Fuente: TodoRelatos

    ... Noelia se iba de Erasmus tendría ayuda y compañía en casa, así que llame a mi hermano y le expliqué que sin problema.
    
    Mi sobrino Alex tiene 22 años, licenciado en Física, deportista, muy alto (1,86m), ojos azules, pelo negro corto, con pecas. Está realmente fuerte, le encanta la piscina y el gimnasio, es el típico “gymrat” que se pasa horas en el gym, así que estaría encantado de tener uno en casa y poder entrenar, o eso creía.
    
    Nunca había visto a Javi como nada más que mi sobrino, como debe ser, pero es cierto que había crecido. Tampoco le di ninguna importancia.
    
    A finales de agosto llegó en tren a la estación, y se cogió un taxi hasta nuestro chalet. No tenía cara de muchos amigos, desde luego que habría discutido mucho con su padre.
    
    Nos saludamos con dos besos y conmigo fue muy agradable, me contó que agradecía mucho la oportunidad (hizo de tripas corazón) y que tenía ganas de conocer gente y ponerse con el máster.
    
    Su tío se puso loco de contento también de que viniese, aunque tenía tiempo libre, nos gustaba cuando podíamos ir a cenar, jugar a las cartas los tres. Lo pasábamos muy bien.
    
    Los días fueron pasando sin ningún sobresalto, hasta que el 31 de agosto, lunes por la mañana, me puse a tomar el sol como siempre hacía en la hamaca de la piscina. Llevaba un bikini bastante sugerente, y llevaba un gorro de paja muy bonito y unas gafas de sol de marca muy bonitas también. Estaba bastante sexy, pero como era habitual. De repente se acercó mi sobrino.
    
    -Buenas tita Oli, acabo de desayunar y me voy a subir al gym un rato, ¿vale?
    
    -Vale Alex, pero hazme un favor,¿me puedes echar crema por la espalda? No vaya a ser que me vaya a quemar…
    
    Os prometo que el favor fue sin ningún tipo de connotación más allá de no quemarme, ya que me costaba un poco esparcir bien el bronceador por mi espalda.
    
    Alex accedió y me echó crema por la espalda, sin saber por qué, estaba temblando, aunque yo no le miraba porque estaba dada la vuelta, pero cuando acabó me di la vuelta rápidamente para darle las gracias y en el pantalón corto de deporte se le notaba un gran bulto. Se fue con mucha vergüenza. Seguramente se había puesto cachondo con mi culo, o con mis caderas pronunciadas.
    
    Me quedé un poco fría, estaba claro que mi sobrino ese sentía atraído por la hermana de su padre. Sea como fuere, tampoco había que darle mucha importancia, ya sabemos como son los chavales jóvenes con estas edades, pero no dejaba de ser una sensación rara que podría definir hasta ligeramente excitante.
    
    Me enorgullecía que con mi edad mi sobrino estuviera como loco por mí, la verdad, y debo reconocer que a partir de ese momento dejé de verle tanto como un sobrino. Era un hombre hecho y derecho, fuerte, musculado, educado, agradable, un poco tímido, pero cariñoso. No sabía que hacer o decir en ese momento.
    
    Además, hacía tiempo que no follaba con mi marido. Tener a Alex en casa más que trabajaba más de 60 horas a la semana incluidlos fines de semana nos dejaban ...
«1234...8»