Insesto con mi padre demente - Relatos Eróticos

Insesto con mi padre demente

Todo comenzó en el mes de Marzo, cuando en una de tantas charlas por teléfono mi mamá me hizo saber que en la casa tenían problemas con mi papá, ya que ella creía que él estaba volviéndose loco, pues llevaba meses olvidando las cosas y desatendiendo el trabajo, ahora me lo decía pues su jefe a cargo le acababa de hablar por teléfono muy molesto para que se presentara ese mismo día (planeaban rescindirle el contrato), pero lo que ocurrió en realidad fue que papá se había perdido mientras se dirigía al trabajo, lo encontraron desorientado al otro lado de la ciudad, en la terminal de autobuses, simplemente se subió al autobús y no recordaba donde debía bajarse.

Esa era la segunda vez que ocurría eso y mamá para no preocuparme no me había contado, pues debes saber que en esos días no estaba viviendo con mis padres, yo vivía en Jalisco desde hacía 2 años pues allí había conseguido mi primer trabajo como auxiliar contable.

Casualmente ese incidente coincide con que yo estaba a solo 3 días de mis vacaciones, pero por la gravedad de este asunto, hablé con mi jefa y después de una larga charla llegué a un acuerdo para que me dejara ir de una vez.

Inmediatamente tomé un vuelo y para el viernes ya estaba en casa, para ese entonces ya lo habían llevado con el médico, aprovechando que el sindicato de su trabajo le había tramitado una licencia médica para sacarlo del problema, pero resulta que el asunto era más serio de lo que parecía, pues después de hacerle muchas pruebas le diagnosticaron un trastorno mental.

El especialista nos hizo saber que posiblemente mi papá tenía ese problema desde joven y se había desarrollado a lo largo de su vida, pero ahora se había agravado, no había mucho que ellos pudieran hacer, así que solo lo enviaron a casa y nos dijeron que estuviéramos pendientes de él.

En cuanto a su trabajo, los líderes del sindicato de alguna forma buscaban quitarle la plaza a mi papá, así que acompañé a mi madre para resolver su situación laboral, concluyendo esto en que tendríamos el beneficio de que alguien de la familia tomara el lugar de mi papá y por casualidades de la vida, la única familiar inmediata en condiciones de tomar el empleo era yo.

Al final acepté quedarme con el trabajo, principalmente lo hice por el dinero, pues iba a ganar más de lo que me pagaban en donde estaba, además de que al estar de vuelta en casa no tendría que pagar renta ni tanto transporte. Y esa fue la solución a dicho problema, jubilaron a mi papá, quien desde hace 5 años cumplía los requisitos de antigüedad y me dieron su plaza.

Por otra parte, de acuerdo con lo que nos dijeron los médicos especialistas, mi madre y yo nos preparamos para lidiar con esta situación, coincidimos en que papá siempre fue muy impulsivo en su forma de ser, a veces era un tanto vulgar y decía las cosas de forma muy directa, era así con todo el mundo quizás debido a su condición, nosotras toleramos sus comentarios inoportunos y mezquinos todo este tiempo, ahora sabíamos ...