1. BOTIN DE GUERRA. Parte 15


    Fecha: 15/07/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Corsario, Fuente: SexoSinTabues30

    BOTIN DE GUERRA PARTE 14.
    
    Bueno, ahora tenia a la puta nazi para él. Se incorporó y la colocó apoyada en el sillón. Qué buena grupa tenia. Volvió a metérsela en el coño de un empujón.. Antes llevaba ella el ritmo de la follada, ahora iba a ser él quien se la follara como le apeteciera. Quería hacerlo violentamente, clavársela hasta que no pudiera más. En el fondo envidiaba las hazañas de “Katiusha” y de “Vlad”, sobre todo porque él no podía rebajarse a tirarse a las putas alemanas que apresaba. Pero esta vez era distinto, Fue la puta nazi la que se le ofreció, y desde luego que iba a joderla hasta hartarse.
    
    Tal y como estaba, con la polla incrustada en el coñito juvenil, le separó las nalgas para poder ver el culo. Lo vio muy enrojecido. Se veía que hacía poco que la habían follado por ahÍ, pues además se notaba muy abierto. Luego lo degustaría, porque ya estaba brillante de la saliva de la pequeña argelina. Pero ahora iba a centrarse en el coño, que se adaptaba a su polla como un guante. A cada embestida que daba, Sigrid respondía con un leve gemido, aceptando la total penetración. El coñito era suave, bien lubricado, estaba claro que a la putita le gustaba follar, disfrutaba y se excitaba, y a fe del camarada Stalin que iba a dejarla saciada.
    
    Incrementó la potencia y la profundidad de las acometidas, sujetando a Sigrid por los hombros para poder llegar hasta lo más profundo del cuerpo de la alemana, que gemía débilmente, pero no se retiraba. Abramovitch la follaba rítmicamente, y de vez en cuando hacía una pausa, con la polla totalmente incrustada y notaba como Sigrid imprimía leves movimientos circulares a su cuerpo, movimientos que excitaban al ruso. La puta quería sacarle la leche, pero él iba a aguantar al máximo.
    
    Sigrid sentía el roce del grueso miembro del Comandante llenándola completamente. El roce con las paredes vaginales, le estaba abocando al placer. Sentía la tensión dentro de su cuerpo, que aumentaba su excitación. Ya había identificado los síntomas que desembocaban en el orgasmo y ahora estaba a punto de sentir el primero de ellos. Y por la dureza del miembro que sentía en su interior, estaba segura que no iba a ser uno sólo.
    
    Abramovitch sentía que las paredes vaginales de Sigrid aprisionaban su polla, aunque sabia que aunque la tuviera más gruesa, tanto como “Katiusha”, la alemana la abrazaría igual. El coñito rebosaba de líquidos viscosos que delataban la excitación de la pequeña puta y aumentaban la suya. Se retiró casi totalmente, frotó el glande contra el clítoris hinchado y volvió a entrar violentamente hasta el fondo. Ahí lo notó…. La pequeña se estaba corriendo y en décimas de segundo la escuchó gemir más fuertemente:
    
    – ¡Aaaaagghhhh! ¡Mmmmmmm! ¡Siiiii, señor, siiii!!!!
    
    Sigrid notaba como las piernas le temblaban, pero el ruso la sujetó por la cintura y le propinó una serie de potentes embestidas, sacando totalmente la polla para volver a incrustarla hasta que los huevos chocaban contra su cuerpo, y ...
«1234...11»