Mario el corneador (cap.10) - Relatos Eróticos

Mario el corneador (cap.10)

... disfrutaba y le gustaba.

Terminando de decirle esto a Sara en aquella conversación de confesiones, cogió su teléfono y marco el número de Clara, no sin antes coger la cabeza de Sara y bajarla hasta su polla para que ella se la chupase.

- Hola mi Amo, que desea?

- Hola perrita, mira, ahora enseguida cuando termine la conversación contigo te enviare un contacto, es Sara, ella es mi nueva amante, quiero que para mañana tengas una tarjeta de crédito hecha a su nombre para que pueda disponer de lo que necesite y pagar algunas deudas, además quisiera que mañana quedes con ella y la acompañes a las boutiques de tu confianza de ropa, lencería y zapatos, le ayudes a elegir para que pueda comprar ropa, lencería, complementos, zapatos, todo lo que necesite.

Después quiero que la lleves a tu joyería de confianza y que se compre una sortija sello para el dedo pequeño con una M y una gargantilla fina con una chapita también con una M, si quiere algo más, que se lo compre.

Tu pagaras todo y la invitaras a comer en uno de esos sitios de moda.

- Muy bien mi Amo.

Desea que la gargantilla sea como un collar?

- No Clara, no deseo que lleve collar, solo una gargantilla y un sello con la inicial M.

- Perfecto mi Dueño, así se hará.

Mario termino la llamada y envió el contacto de Sara a Clara, con su teléfono.

Dejo el teléfono en la mesa y le indico a Sara que se incorporase, ella se sacó la polla de la boca y se sentó junto a Mario, él le bajo un poco el sujetador dejando sus pechos al aire, enseguida le chupo un pezón y le beso el otro, le gustaban mucho los pechos de Sara.

- Estoy un poco descolocada Mario, claro que he oído la conversación y he escuchado como te llamaban Amo y te obedecían, me gustaría saber más sobre ti Mario, creo que hay muchas cosas que desconozco.

- Lo que has escuchado es un problema para ti, dijo Mario sonriendo.

- Nada de eso, quizás hasta todo lo contrario pero mi curiosidad se ha despertado.

Mario la agarro de un pecho y la atrajo hacia él, la beso y sin soltar el pecho.

- Si, tengo dos sumisas en propiedad, viven conmigo, me pertenecen, llevan una vida de absoluto control por mi parte y de entrega total por la suya, fue su decisión y yo la acepte.

Antes de seguir respondiendo a tus preguntas o mejor dicho dejando satisfecha tu curiosidad me gustaría tomarme otro vino y algo de picar, me invitas?

Sara sin moverse de cómo estaba llamo a Alberto y le dijo que les sirviera otros dos vinos y algo de picar. Mientras lo pedía Mario seguía acariciando los pechos de Sara y ella la polla de su amante.

- Bueno, sigamos que aún no lo tengo claro Mario.

- Si, sigamos, te dejare claro lo que quieras, pero me gustaría decirte antes que me ha gustado mucho cuando has dicho que someterías más a tu cornudo, bueno, esta algo fuera de lugar que tú y yo estemos casi desnudos y el vestido, no te parece?, le dijo sonriendo.

- Tienes toda la razón cariño, dijo ella.

- Mas que nada Sara para que ...