La Piara: Puente de Mayo 2023 I - Relatos Eróticos

La Piara: Puente de Mayo 2023 I

... gente – comento la MILF, con una falsa timidez que no había tenido en toda su vida.

- No se preocupe, señorita – dijo el recepcionista, tirando de diplomacia – seguro que si lo esta y se le ponen como ahora, muchos se lo agradeceremos.

- Pues si lo hacen, ya vendré a agradecerle el piropo en persona ji ji ji – rió mi mujer, haciendo que sus ubres se movieran arriba y abajo mientras le daba un toquecito en la mano, signo de complicidad.

- Pues si ya estamos, le agradeceríamos mucho que nos indicara donde están nuestras tiendas, por favor – Le dijo vaca al hombre con una sonrisa picarona y una mirada capaz de ponérsela dura a un muerto.

- Por supuesto, señorita – Dijo inmediatamente el recepcionista – Solo dejen que haga venir a un compañero para que se encargue de la recepción y les guiare personalmente.

- ¿En un carrito de esos eléctricos que he visto a la entrada? – pregunto la enfermera, dando pequeños saltitos como si fuera una niña pequeña, lo que hizo que su top tuviera que hacer verdaderos esfuerzos para contener sus ubres – No he montado nunca en uno que no sea fuera del campo de golf ¿Podría acompañarle?

Por la conducción que realizo aquel trabajador desde la recepción hasta nuestros alojamientos, todos supimos que la enfermera estaba haciendo de las suyas y cuando bajo para abrirnos las puertas de las tiendas, era más que evidente la erección que presentaba en su pantalón corto.

- ¿Amo, le importa que entre un momento con este simpático caballero? – Pregunto vaca, que tenia los pitones totalmente tiesos, señal e su excitación sexual – Me gustaría que me explicara con detalle como funciona el calienta leches ji ji ji

Cabecee ligeramente y mientras estacionábamos las Mercedes en la zona reservada para las parcelas, vaca entro en el bungaló y en apenas cinco minuto volvió a salir, con el escote visiblemente manchado de semen. Detrás suyo, salía el recepcionista, rojo como un tomate y mirando hacia todos lados, temeroso de que alguien hubiera podido apercibirse de la jugada.

- Ya esta, Amo – me dijo vaca, sin limpiarse el chorretón ni recomponerse el top, que casi se había convertido en una franja que unía sus dos pezones, señal inequívoca de que mientras ella le hacia lo que quería al trabajador, él, le había estado sobando los tetones – este amable caballero andante me ha explicado muy bien como va todo y me ha dado su teléfono por si necesitamos alguna cosa o tenemos algún problema durante nuestra estancia, que lo pueda solucionar. Además, me ha enseñado perfectamente lo bien que funciona “todo”.

- Muchas gracias por su caballerosidad – le dije al currante mientras le estrechaba la mano y le entregaba un billete de 50 euros pese que con la mamada que le había pegado vaca seguramente se daba por generosamente recompensado – no tenga duda de que su maravillosa atención se vera correspondida. Pase cuando quiera por aquí a tomar algo o a ponerle más “bronceador” a mi esclava. O si quiere cambiar y probar otros ...