1. FABY A SUS 14, CONOCIÓ EL ORGASMO EXORCISTA


    Fecha: 31/03/2024, Categorías: Dominación / BDSM Voyerismo Autor: zoorromexico, Fuente: SexoSinTabues30

    ... eran insuficientes para terminar la secundaria y yo tenía acceso a todos los exámenes finales e incluso a su expediente escolar.
    
    Efectivamente, soy un caliente incorregible y, en aquella época, mi lascivia y concupiscencia estaban en el máximo nivel, la reata la traía parada todo el tiempo; estar en esa escuela era como haber entrado a la dulcería. Por la lujuria de esos años, y por lo caliente que me resultaba reventarle la concha a otra niña, decidí desvirgar a Fabiola, clavándole la verga sin piedad alguna y mamarle y lamerle todo ese voluptuoso cuerpo. Sus incipientes tetitas, pronto serían estrenadas por mi boca, mis labios y mi lengua rasposa como de gato harían un exquisito trabajo.
    
    La llamé para comentarle que los exámenes serían muy difíciles y que muy pocos alumnos podrían con ellos, y yo esperaba que ella saliera avante. Por supuesto que me confesó que no podría con ellos y me suplicaba que le ayudara. Decidí mañosamente darle clases particulares durante los descansos y por las tardes en la biblioteca o en algún otro lugar. Al comportarme yo como un caballero decente, agradable y esplendido me fue tomando confianza y afecto, hasta que se convirtió en un sentimiento de loco amor adolescente.
    
    Empezamos a besarnos en mi auto, lo que facilitaba el cachondo manoseo que le prodigaba; ya en confianza, me pedía besos más fuertes y apasionados y que la apretara contra mi pecho. Yo no desperdiciaba el momento y la besaba con la boca abierta y metiéndole la lengua hasta las anginas; ella se excitaba de manera muy cabrona.
    
    Una de esas tardes, no hicimos estudio y la llevé a una calle desierta, la besé y le acaricié la panocha, le levanté la blusita y el corpiño, para poder mamarle las tetas y tragarme esos pezones adolescentes. Mi mano derecha que acariciaba su conchita, sintió como su calzón ya estaba empapado de sus jugos vaginales, su aroma era dulce y delicado, pues sus hormonas aún estaban en trabajos de desarrollo. Era normal que suspirara y gimiera de vez en vez, mientras la tocaba, sus contracciones eran fuertes, pero aún no podían llamarse orgasmos.
    
    Me bajé del auto para ir hacia su puerta, la abrí y le pedí que se recostara en los dos asientos, le levante las piernas y le bajé la pantaleta hasta medio muslo y me dirigí hacia su pocito del amor con una lengua ya entrenada y muy rasposa, le primera lamida fue directa a su clítoris, se sacudió como si hubiera recibido una descarga eléctrica, era brutal la tremenda mamada que estaba recibiendo, pero debo aclarar que para un mayor gozo con ambas manos le abría su bizcochito, al tiempo que mi lengua muy mojada entraba y salía de manera frenética de ese pocito, me recordó la escena de la niña del exorcista metiendo y sacando la lengua; ahora sí le produjo su primer orgasmo en forma.
    
    Con un gemido sordo, empujó mi cabeza y con un par de lagrimitas de delirio, me dijo que nunca había sentido un placer tan intenso. Me bajé a ver sus orificios y noté que ambos eran de un color ...
«1234...»