1. El Santero apenas me vio dirigiéndose a mi me dijo, además de que estas resalada, estas cruzada, y te tienen bien clavada.


    Fecha: 08/03/2024, Categorías: Dominación / BDSM Infidelidad Sexo en Grupo Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30

    ... a mover mis caderas a medida que ella prácticamente metía y sacaba su mano de mi culo.
    
    Luego en fracciones de segundos extrajo todos sus dedos, y sin demora, me ha introducido seguramente la figura de madera, lo extraño fue que apenas lo hizo sentí su cuerpo sobre el mío.
    
    El Santero, me tomó por el cabello, y levantando mi cara, colocó su miembro dentro de mi boca, poniéndome a mamárselo.
    
    Pero en cierto momento fue tan fuerte la manera en que me empujaba su verga que sentí que me llegó bien adentro de mi garganta, haciendo que yo no pudiera contener las ganas de vomitar, al tiempo que él sacaba su verga.
    
    Quedé desfallecida, y hasta dormí por un largo rato, al despertarme, mi amiga estaba a mi lado, bebiendo en compañía de varios hombres desnudos que yo desde luego, no conocía, ella me condujo al baño, me di una rápida ducha, y regresamos con todos esos tipos.
    
    Los que sin decirme nada comenzaron a tocarme por todas partes, mientras que yo volvía a darme otro trago de aguardiente.
    
    En cosa de poco rato ya uno de ellos me estaba clavando su verga, mientras que a mi amiga le daban por el culo.
    
    El resto de la noche la pasé de verga en verga, en ocasiones mamando y en otras dejando que me la clavasen por donde a ellos se le antojase.
    
    Ocasionalmente el Santero se asomaba a echarnos un ojo, pero de inmediato se marchaba, mientras que nosotras dos disfrutábamos como locas.
    
    Una vez que todo terminó, al día siguiente al despertarnos, el Santero se nos acercó, y tanto a ella como a mí nos entregó una buena cantidad de dinero.
    
    Por lo que me quedé bien confundida, hasta que mi amiga me explicó que, todos esos hombres, le pagaban al Santero por limpiarlos, y como nosotras dos hicimos el trabajo fácil, él compartía su dinero con nosotras.
    
    En medio de todo, al principio me sentía sumamente confundida, por una parte, me sentí como si hubieran abusado de mí, por lo que estaba algo molesta, pero por otra parte, me encontraba sumamente satisfecha por lo mucho que disfruté lo ocurrido.
    
    La verdad es que mi marido finalmente se divorció de mí, mi hija fue expulsada del colegio, al asegurar que el padre de su hijo era un maestro, lo que eventualmente resultó ser falso, ya que mi hija se había acostado con más de medio colegio, incluso con el conserje.
    
    Mi hijo, definitivamente cambió, ahora cuando sale de casa lo hace vestido de mujer, por lo menos ya no lleva sus amigos a nuestra casa, ya que según supe después, lo llevan a algún motel, y finalmente a mí me votaron del trabajo.
    
    Pero a pesar de todo eso continuó visitando al Santero en compañía de mi amiga, cada vez que él nos llama para que lo ayudemos a limpiar a varios de sus clientes. 
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