Servicios Comunitarios - Relatos Eróticos

Servicios Comunitarios

(Ultima traducción de las historias de CollaredSlutGirls desarrolladas en su mundo de esclavitud femenina. Todavía quedan unas treinta historias ambientadas en diferentes mundos que seguire traduciendo y publicando.

Gracias por leer estas historias, por vuestras valoraciones y comentarios)

Historia 36 – Servicios Comunitarios

‘Llame al próximo caso, alguacil;’ sonó la voz imperiosa cuando la puerta de la sala se abrió de par en par, dos oficiales escoltaban a una adolescente histérica esposada al pasillo. Rebecca miró la cara llena de lágrimas de la rubia y se preguntó si la seguiría en breve.

‘Vamos, entonces;’ dijo su propio escolta uniformado y la sacó del banco en la sala de espera para las prisioneras. Su mano se cerró alrededor de su codo, ella solo podía esforzarse para mantenerse a su lado a pesar del paso corto al que la limitaban los grilletes de los tobillos. Sus manos estaban igualmente unidas en esposas, aunque afortunadamente esposas emitidas por la policía y no las esposas semipermanentes que usaban las esclavas. Él tiró de su brazo y ella casi tuvo que dar un salto para mantenerse en pie, gruñendo tanto como pudo a través de la bola abrochada en su boca, dilatando su mandíbula y haciéndola babear sobre la camisa de la prisión que usaba - la tradicional , rayas en blanco y negro de antaño, de manga corta con un escote pronunciado y un dobladillo que apenas cubría su culo y coño desnudos. Ella no usaba pantalones ni ropa interior.

Cuando Rebecca entró en la sala del tribunal, con los ojos fijos en el suelo, los pies descalzos en las esposas avanzando suavemente por el pasillo, cada movimiento de sus caderas provocó que su delgada camisa de prisión amenazara con elevarse lo suficiente como para exponer su coño a la audiencia embelesada. Mientras caminaba no pudo evitar pensar en por qué estaba aquí y no en un corral de esclavas siendo marcada y violada en ese momento.

Después de años de canalizar a todas las mujeres que cometían delitos de cualquier magnitud directamente al procesamiento de esclavas, hubo solicitudes del público para una reforma de la justicia penal, permitiendo que las mujeres que cometiesen errores menores recibiesen corrección sin terminar desnudas y esclavizadas de inmediato. ¿Realmente una chica merecía terminar siendo esclava debido a una multa por exceso de velocidad, se preguntaron algunos? ¿No tenían las mujeres libres más derechos que ser reducidas al estado de una mera propiedad por tecnicismos legales? ¿Y el incesante incremento de mujeres con collar por leves infracciones de la ley no amenazaba con saturar los mercados de esclavas y hacer que los precios fuesen demasiado bajos para mantener márgenes de beneficio saludables?

Finalmente fue el último argumento, impulsado fuertemente en los pasillos del poder por los lobbies pagados por la industria esclavista, el que probablemente convenció a los legisladores para que restableciesen los juicios legales para las mujeres acusadas de ...