1. Tu, mi complemento perfecto 5


    Fecha: 13/01/2024, Categorías: Lesbianas Autor: Bella15, Fuente: TodoRelatos

    ... con que seas raro o con que tengas un tercer brazo, porque vamos, que la mayoría de la gente piensa que somos unos extraterrestres. Si no más bien, el ser poco sociable o introvertido, va ligado a que tenemos necesidades sociales distintas a los demás, como, por ejemplo; disfruto de leer un libro, ver una película, o simplemente pasar tiempo a solas, porque no importa cuantos amigos tienes, sino de cómo te sientes con los amigos que tienes. Eso fue lo que aprendí mientras estuve en la residencia de acogida y tal vez, nadie podía entenderlo.
    
    —¿Lista para tu primer día? —escuché a un compañero, mientras me ataba los zapatos.
    
    —Sí, muy lista —sonreí.
    
    —Eso es bueno, entonces tendrás un buen primer día—me dio una sonrisa de vuelta—Me llamo Liam, soy el cocinero a cargo —extendió su mano.
    
    —Soy Malya—imité su gesto—¿Me dirás en que consiste el menú de hoy? Ya sabes, para no estar tan desorientada —expresé.
    
    —Me encantaría, pero estoy algo retrasado—respondió, al mismo tiempo que se cambiaba la camisa frente a mí—Sin embargo, esto te puede servir —me paso una pequeña libreta que contenía el menú.
    
    —Gracias, me has salvado el día —dije, mientras ojeaba aquellas hojas.
    
    —Mientras llega la clientela, puedes ir acomodando el lugar e ir leyendo en que consiste el menú de hoy —sugirió, antes de marcharse.
    
    Terminé de colocarme el delantal y salí para ir ambientando el lugar. Ayude a mis dos compañeros a bajar las sillas de las mesas, a cambiar los manteles que estuviesen sucios, a colocar el servilletero y todo lo que se requería para adecuar el restaurante antes de su apertura. Sin embargo, aquellos quehaceres no ayudaban a calmar mis nervios y la ansiedad por mi primer día de trabajo, porque hasta donde sabía, ese primer día laboral suele ser bastante complicado y estresante, especialmente cómo actuar, cómo será tu futuro jefe o cómo me iría desenvolviendo con mis compañeros.
    
    Los minutos fueron pasando y de a ratos se llenaba el local, otras veces estaba medio vacío o simplemente, solo había un par de personas como las que me tocaba atender en ese instante. Mientras iba a esa mesa para atender aquella joven que se encontraba de espalda a mí, iba memorizando los platillos del día para no equivocarme, pues era la misma táctica que había hecho la última hora, mas no imaginé que esa figura femenina se trababa de Charlie, “Mi Charlie” me perdí en sus ojos, en su voz, en su aroma que tanto había echado de menos. Verla frente a mí, lleno mi cabeza de muchas ideas, de interrogantes y posibles preguntas que ella me haría.
    
    Quizás me pediría explicaciones de cuándo salí de la residencia de acogida, de por qué no la busqué o por qué la trate tan mal la última vez que nos vimos y no estaba segura si yo podría darle todas las respuestas. No estaba segura si le hablaría con calma, si ella me entendería las razones por la que actúe así o me soltaría todo lo que se ha guardado durante estos años, porque desde su punto de vista, ella era la que ...