1. Disciplina doméstica: mi mujer y mi suegra cap 5.


    Fecha: 24/08/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: sumisso, Fuente: TodoRelatos

    ... vestido de criada al suelo y solté un verdadero discurso de los míos. Soy una persona muy estúpida, pero con sentimientos. Nunca se me han dado mal los discursos, en mi trabajo es muy habitual y son espontáneos. Es exactamente lo que hice:
    
    -Cometí un error. Me casé con una mujer que me quería; la defraudé, la humillé, fui infiel, pero…. nunca me fui con otra mujer, deseaba a mi mujer. Intenté separarme y dejaros en la calle, pero he pagado todo, he sido vuestro esclavo, he sido humillado, castigado duramente…. Pero nunca he deseado abandonaros, he pagado mi pecado. Sin embargo, tu…. te has enamorado de otro hombre, me has humillado, he sido cornudo… en tal caso, recibirás tu castigo tal como he hecho yo…. ¿verdad? - Tiré contra el suelo el traje de criada y lo pisoteé delante de las señoras. Mi enfado era brutal, estaba muy decepcionado.
    
    -Haced conmigo lo que querías…. Se acabo la criada Manuela …. Desde hoy no volvías a dirigirme la palabra. ¿Queréis que me marche de vuestra casa?... Así lo haré, Algún día pagareis por vuestros actos. Os he dado todo, pero se acabó…… No quiero estar cerca de vosotras…. me da igual lo que hagas, mañana por la mañana abandonaré la casa. - Sentencié furioso y malhumorado como nunca había estado debido al engaño de mi mujer.
    
    Me fui a mi habitación y me acosté en la cama a dormir. Estaba enojado y lloraba como un niño que le han quitado su juguete. Me habían hecho daño de verdad, no físico sino emocional. Me daba igual el rumbo de mi vida. Se quedarían con todas mis posesiones, pero tendría la conciencia tranquila. Media hora después se abrió la puerta de la habitación, pensé que era mi mujer. Un cuerpo voluptuoso y muy grande se introdujo dentro de la cama, supe que era mi suegra por su gran tamaño. Me abrazó y me rodeó con sus grandes brazos pegando su cuerpo a mí por detrás dentro de la cama.
    
    -No te preocupes…. Nadie te va a echar de esta casa mientras yo esté aquí…. Yo te quiero…. - Me dijo susurrándome al oído el ogro de mi suegra. Me abrazó fuertemente y ambos quedamos dormidos. Mis sentimientos hacia mi suegra, la señora Claudia, cambiaron por completo. Ella me quería, a su manera, pero me quería, era su hombre y su posesión.
    
    A la mañana siguiente , entró mi suegra en la habitación. Ya estaba haciendo la maleta para marcharme de casa. Se sentó en la cama y me hablo seriamente, no furiosa, solo seria y sincera:
    
    -Mi hija se ha comportado como una estúpida. Está decidida a casarse con el tal “Jean Paul “. ¡¡ No sabe apreciar lo que tiene ¡Va a pedirte el divorcio y se quedará con todo! La he puesto una condición; Me traspasará a mi todas tus posesiones y tu firmaras el divorcio. Te casaras conmigo y todo volverá a ser nuestro. Se casará con el “francés “pero tu y yo viviremos aquí, yo seré la dueña de todas tus posesiones, pero no te abandonaré porque te quiero – Sentenció el ogro de mi suegra. Unas lagrimas resbalaron por mi mejilla, esta vez no de dolor, sino de sentimiento.
    
    -¿Quieres ...