Al calor del verano: cuernos y otras relaciones - Relatos Eróticos

Al calor del verano: cuernos y otras relaciones

... planteando que se acueste con su propia hermana. Imagínate que se entera tu madre. Sería mortal para él y también para ella. ¿Y tu padre? ¿Y Toni? Dale tiempo, Yoli.

Y-¡Lara!

L-Y Raúl qué opina.

Y-No me hables de Raúl.

L-¿Qué pasa con Raúl, Yoli?

Y-Creo que no me lo merezco. Es demasiado bueno, Lara. Él sabe lo de mi hermano y opina que lo mejor sería liarnos un día los cuatro. Sería menos violento para todos. Joder Lara, está genial, pero quiere follarte a ti también.

L-Y a tu hermano.

Y-¡Lara!

L-¡Qué! Es la realidad. A Raúl le gusta Bruno, como a mí me gustas tú

Y-Y tú a mí, ¡imbécil!

L-Yoli, se supone que yo soy la impulsiva, agresiva. Deja de insultarme y dime de una vez qué quieres, porqué me has hecho quedar entre semana.

Y-Lara. Este finde Toni y Andrea se van fuera. Tenemos la casa sólo para los cuatro. Ya sabes…

L-Habla con tu hermano.

Cuando llegué a casa Bruno estaba despierto y con cara de pocos amigos.

B(Bruno)- ¿Ya te ha convencido? ¿Ya lo habéis arreglado todo? ¿Todo planeado?

L(Lara)-¡Qué me estás contando, Bruno! A qué viene este recibimiento tan hostil.

B-Ya has quedado con mi hermana para este fin de semana.

L-¡Bruno! Por dios. Por qué no confías en mí. Yo nunca haré nada que no quieras hacer tú. Sí, tu hermana me lo ha dicho, pero no hemos planeado nada. ¡Vale! Relájate. No me quiero enfadar contigo.

B-Stefi está en la habitación de invitados, (con gesto serio)

L-¿Te la has follado? ¡Qué ha pasado!

B-¡Hostia Lara! Me estás haciendo enfadar. Siempre con el puto sexo en la boca. ¡Pues no! Ha llegado llorando a moco tendido. Julia está embarazada. Ella se ve el percal. Está hecha polvo. Me ha pedido quedarse. No he sabido decirle que no.

L-¡Joder! ¿está durmiendo?

B-Supongo. Me voy yo también a dormir, Larita. Estoy agotado, física y mentalmente. Lo siento si te habías hecho ilusiones de tener sexo esta noche.

L-No te preocupes, cariño (abrazándome a él y besando suavemente sus labios)

Entré en la habitación. Estefanía, (perdonadme, pero cuando está en plan angelito me es imposible llamarla Stefi), dormía plácidamente. Estaba preciosa, desnudita sólo con un tanga muy bonito. Le dí un besito en la frente, aunque me hubiera gustado comerle los pezones, sacarle la braguita y lamerle la rajita.

Sin querer quererlo, el fin de semana se nos echó encima. Era viernes por la noche y el calor era asfixiante. Bruno pasó a recogerme por el trabajo. Estaba de muy buen humor el tío. Estuvo saludando a Alicia e incluso se hicieron bromitas: ella le tocó el culo y él se rió. Después, fuimos a cenar de picoteo a un bareto muy conocido de nuestro barrio. Yo no paraba de quejarme del calor. Entonces llegó la sorpresa. Bruno me preguntó si quería ir a bañarme en la piscina de sus padres y así refrescarnos. Le dije que no tenía bikini y el me respondió que pillara uno de su hermana o me bañara en pelotas. ¡Se había vuelto loco este niño! Le advertí que posiblemente su hermana ...