El pintor de renombre 4 FINAL. - Relatos Eróticos

El pintor de renombre 4 FINAL.

... momento, cielo.- y empezó a esbozar ansioso en un cuadernillo.

La joven se ruborizo al ver que la quería pintar, y mantenía la postura con una risita nerviosa, al ver al artista tan concentrado, con su polla tiesa. Pero es qué la joven estaba muy, muy sexy algo inclinada, con el sol definiéndole, como sobándole todo el cuerpo con deseo.

Acabo enseguida, y se sentó buscando sus puros, con ella acercándose a él con el café, deseando meterse esa polla por la garganta. Pero antes le dijo, algo triste:

-Me halaga maestro, y más su forma de mirarme, no sabía el efecto que le causaría. Pero no podría pagarle el retrato.- le explico con voz de niña apenada, cogiéndole la polla y poniéndose de rodillas con los ojos brillantes de deseo.

-Sera para tu dote, además de un buen dinero que le daré a tu tío, para que seas la novia más guapa del pueblo, y la familia de ese joven ricachón, se sorprenda.- le dijo, viendo como le sonreía contenta, con la polla entrándole hasta las pelotas, con solo un par de intentos.

Se tomaba el café de la mañana con su puro, con la joven cada vez más animada y experta. Se la sacaba y se la lamia con su sonrisa, y el artista apago su puro, haciéndola subirse encima.

Le sorbia los pechitos y ella se la llevaba a su culito empezando a gemir con el placer que le daban sus pechitos lamidos, mordidos y chupados con fuerza. Puso su boca en el hombro de él, y empezó a empalarse resoplando.

-¡Mmmmh! ¡Mmmmh! ¡Ooojj! Hoy la quiero más adentro ¡Oooojj! ¡Mmmmh! ¡Ooojj! .-le confeso la joven, viendo el empeño que le ponía, con su cara de deseo y dolor.

Fabian agarro su polla por el tronco, la hizo parar, y lamiéndole el cuello hasta su oído, le dijo:

-Por ahora asi está bien, ahora a cabalgar jovencita, tengo que bajar a desayunar.- y la joven le miro con la boca abierta de goce, empezando a botar cogiéndose de su cuello.

-¡Ooh! ¡Ooh! ¡Ooh! ¡Mmmh! ¡Mmmmh! ¡Ooh! ¡Ooh! ¡Ooh! Más, déjeme un poco más ¡Oojj! ¡Oojj! ¡Oojj! .- le insistió, viendo como le negaba, pero le llevaba una mano a su coñito, sabiendo lo que pasaría.

Pero la joven se anticipó, y aumento más la folláda, llevando su cabeza a un pecho, con Fabian gozando de ese culito que le apretaba con fuerza mientras la joven se corría y seguía su veloz cabalgada.

Enseguida hizo que el artista se corriera, cambiando el pecho por su cuello y lamiéndola mientras ella seguía estoica follándose el culo entre espasmos y jadeos, apoyada en el hombro de él.

Quedaron quietos unos segundos, y ella hacia círculos con su pelvis y sus débiles gemidos. Se levanto, se volvió a poner de rodillas, y se la trago con mucho mimo y dedicación, mirándose a los ojos y con su culito aun dando algunos saltitos.

Salió de la habitación sonriente y con las mejillas rojas, pero sobre todo cambiada, ya no era una jovencita inexperta. Y le daba una risita nerviosa al recordar la cara del maestro al verla entrar de tal guisa, y como le felicitaba sorprendido de su iniciativa, al ...