1. Clases Particulares Día 1 Parte 2


    Fecha: 08/08/2019, Categorías: Grandes Series, Autor: Lanre, Fuente: TodoRelatos

    ... mierda.
    
    —¿Es una invitación? —La Valentina sonrojada hizo aparición ante mi proposición. Llevaba un pijama, o al menos el pantalón era parte de un pijama, la remera vieja de Hello Kitty parecía ser solo eso, una remera vieja y holgada—. No te preocupes, yo tampoco tengo ganas de estudiar.
    
    Valentina parecía entonces preguntarse entonces cuál era el motivo de miintermisión.
    
    —No, no quiero que me chupes nada.
    
    —Fue una pregunta retórica, Valentina.
    
    —¿Qué es retórica?
    
    —Lo que siempre haces —dije con soltura—. Te traje una crema, el chico de la farmacia me lo recomendó, también pastillas para el dolor muscular aunque no sé si te vaya a servir.
    
    Silencio. Valentina observó la bolsa en mis manos, y supo que no mentía.
    
    —De dónde…
    
    —Llevas toda una vida diciendo friki, y no sabes nada de nosotros, un friki tiene el hábito de estar preparado en caso de un apocalipsis zombi o una invasión extraterrestre. Soñamos con el momento.
    
    —¿Llevas contigo un botiquín?
    
    —No, pero debería. La verdad es que fui a la farmacia —expliqué—. De paso fui a comprar comida.
    
    —No te lo voy a agradecer —agarró la bolsa de un tirón—. Debiste intervenir antes. Debiste defenderme ¡Yo soy tu novia! —Silencio. No esperaba tanto silencio; y el silencio en abundancia atrae a su prima: incomodidad—. No, no, lo quise decir es que ella piensa que tenemos algo. Tenías una tapadera; me hizo daño y no hiciste nada. Tuve que suplicarte.
    
    —Perdón.
    
    Mierda, otra vez el silencio.
    
    —No vas a decir qué me lo merezco, qué yo te hacía lo mismo. Es el momento, burlate, ríete de mí.
    
    —Solo me lo hiciste una vez —recordé—, y no fue para tanto, si hacemos una comparación.
    
    —Te odio. Realmente te odio.
    
    —Lo sé. ¿Planeas vengarte de Adriana? —Quería saber más de su relación con su hermana. ¿La Valentina que yo conocía seguía estando ahí?
    
    —Por supuesto —habló como la reina que era. Con ese sentimiento de superioridad y soberbia, y con una pizca de orgullo herido—. Es la guerra.
    
    Ella seguía siendo Valentina Rhodes.
    
    —Renunciar, no parece una mala idea —murmuré al aire.
    
    —No puedes irte. Romina asumirá que es por mi culpa. —¿Y no lo sé? Yo solo debía ser tu tutor, pensé un tanto fastidiado.
    
    —Voy a bajar —Moví la cabeza. Fue mi manera de despedirme—. El celular, le quite el bloqueo automático. Puedes usarlo el tiempo que quieras. Si mensajea mi madre, dile que estoy bien, y que la señorita Romina me trata bien.
    
    —Espera —gritó—. Adonde vas, te la tengo chupar.
    
    —Prefirió comerme una rica empanada. —Valentina se llevó las manos a su intimidad, como queriendo proteger su tesoro—. No me refería a tu empanada. —Toci. Me tragué la risa—. Maca compró comida, ¿quieres que traiga alguna?
    
    —Unas dos estarían bien. —Dado que no me insultó, debía de tener hambre pero no podía bajar, ya que su orgullo aún estaba dañado. Cada vez conocía mejor a Valentina.
    
    —Afuera, encontrarás un tupper con empanadas y una lata de gaseosa —indiqué—, son tuyas.
    
    —¿Es ...
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